Coated Solutions, empresa dedicada a la producción de acero prelacado, tendrá el año próximo una segunda planta en funcionamiento en el puerto de Santander, en la que invertirá 45 millones de euros, con la que completará el proceso de fabricación y se plantea abordar el mercado estadounidense.

Este proyecto, que ya cuenta con la licencia municipal y que contempla la creación de unos 500 empleos, entre directos e indirectos, ha dado hoy un nuevo paso adelante con la firma de la cesión de más de 60.000 metros cuadrados en el espacio portuario, donde se ubicará la nueva factoría.

La concesión de esos terrenos, por 45 años, la han firmado hoy el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna; el presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, Jaime González, y el presidente de la empresa, Óscar Heckh, en presencia de la vicepresidenta de España, Soraya Sáenz de Santamaría, y del presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla.

En un encuentro con periodistas, Heckh ha avanzado los plazos que maneja la empresa para la puesta en marcha de esta nueva factoría que se comenzará a levantar en terrenos del puerto de Santander en dos o tres semanas.

Con una inversión total de 50 millones en capital fijo y otros 50 de capital circulante, la nueva planta ocupará cerca de 61.000 metros cuadrados, más de la mitad cubiertos para distintas fases de la producción y servicios de la empresa.

La previsión es que las máquinas arranquen la producción en el segundo trimestre del próximo año y que estén a pleno funcionamiento a finales de 2019, con una plantilla de 200 personas, a las que se podrían sumar otros 300 empleos indirectos cuando la planta esté a su máximo rendimiento, en dos o tres años.

Esta nueva factoría completará el proceso de producción de acero prelacado que Coated Solutions desarrolla en el puerto de Santander y que ahora solo se realiza en una última fase partiendo de la bobina de material galvanizado, al que se somete a una limpieza para su posterior pintado.

En la nueva planta se instalarán tres líneas de producción, una de decapado, necesaria para el tratamiento posterior, con una producción de un millón de toneladas; una de laminación de frío, para reducir el espesor del acero, con capacidad para 310.000 toneladas; y una de galvanización, para 270.000 toneladas.

"Nos estamos integrando aguas arriba", ha resumido Heckh, quien ha explicado que el destino de esta producción será la península ibérica y Europa, aunque ha apuntado que debido a la nueva situación arancelaria que pesa sobre el acero tras las decisiones del Gobierno de Estados Unidos, la empresa se plantea también abordar ese mercado.