Varios niegan haber mantenido relaciones sexuales con el denunciante y dos se han acogido a su derecho a no declarar

Los seis acusados de tener sexo con un menor de 15 años han asegurado que el denunciante --que ofrecía sus servicios por dinero en una página web-- les dijo que era mayor de edad y han mantenido que físicamente, aparentaba serlo. Además, varios ha negado haberse acostado con él y el acusado de violarle ha afirmado que solo llegaron a tocamientos y fueron consentidos previo pago.

Así lo han declarado este martes durante la primera sesión del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial, en la que dos de los acusados se han acogido a su derecho a no declarar y otros solo han contestado a preguntas del Ministerio Fiscal y de su defensa.

La Fiscalía pide una pena de un año y medio de prisión para cada uno de los seis hombres por un delito de prostitución y multa de 5.760 euros, así como ocho años más para el acusado de la agresión sexual y dos más para uno que supuestamente le proporcionó clientes para repartirse las ganancias con el menor. Como responsabilidad civil, pide también que, solidariamente, paguen 3.000 euros por los daños morales y al acusado de violarle 2.000 más.

La acusación particular pide, por su parte, 2 años y 6 meses de prisión para los acusados por un delito de prostitución y 10 años de cárcel para el que supuestamente le violó. Además pide para cada uno 7.200 euros de multa. Y en concepto de responsabilidad civil, esta parte reclama una indemnización conjunta de 15.000 euros y otros 9.000 más para el supuesto agresor.

Los hechos por los que se les acusa a estos seis hombres ocurrieron entre finales de 2013 y principios de 2014. Dos de los acusados han reconocido que sí quedaron con el menor a través de la página web en la que éste ofrecía mantener relaciones sexuales a cambio de dinero pero ambos aseguran que éste les aseguró que tenía 18 años.

EL SUPUESTO AGRESOR LO NIEGA

Uno de los que contactó con él por la web es el acusado de agredirle sexualmente, extremo que ha negado.

Ha relatado que quedó con el chico en dos ocasiones, en las que se citaron en un aparcamiento de la localidad donde el denunciante residía y luego se trasladaron a una pensión del mismo municipio que éste propuso.

El acusado ha explicado que en ambas ocasiones fue quien se registró en la pensión sin que la recepcionista pidiera sus datos al chico ni hiciera ninguna observación sobre su edad.

Además, ha asegurado en ninguna de las dos ocasiones hubo penetración. De hecho, ha afirmado que en esas citas el denunciante --previo pago por sus servicios-- le desnudó y se desnudó hasta quedarse ambos en calzoncillos para luego empezaron a tocarse.

Sin embargo, ha explicado que en ninguna de las dos citas llegaron a nada más porque él (el acusado), que acababa de empezar a tener relaciones con hombres, se "ponía muy nervioso", sentía "náuseas, mareos y taquicardias" y se tenía que marchar.

Ha detallado que en ambas ocasiones estuvieron en la habitación de la pensión "entre 10 y 15 minutos" y siempre salieron juntos de la pensión. Tras esas dos citas no quedó más con el denunciante. "Decidí no tirar 60 euros a la basura", ha dicho.

Cuestionado sobre la supuesta agresión, que se habría producido en la segunda cita, ha asegurado que "no es cierto" y ha señalado que tras quedar esas dos veces "estuvieron un tiempo" hablando por WhatsApp.

Según el escrito de la Fiscalía, el acusado, "con la finalidad de satisfacer sus deseos lúbricos, agarró por el brazo por detrás al menor y le tiró en la cama, donde le agredió sexualmente" y ello después de que el joven le dijese que no quería hacer nada.

El otro acusado que ha reconocido haber contactado con el chico a través de la web, ha relatado que quedó con el chico en tres ocasiones y mantuvo sexo con él en la parte trasera de una furgoneta en un aparcamiento y le pagó lo que éste le pidió.

Aunque ha reconocido haber tenido sexo con el denunciante, ha asegurado que "nada más verle" le preguntó si era mayor de edad y éste le dijo que tenía 18 años. "El carné no me lo va a enseñar", ha añadido el acusado, que llegó a regalar al chico un móvil para quedar "en futuros servicios".

"Yo no sabía que era menor de edad", ha insistido el acusado, que ha explicado que en una ocasión en la que, supuestamente, quedó con el chico, no apareció él sino su madre, que "le agredió" y golpeó la furgoneta. Tras ello, no volvió a ver al chico.

DOS NIEGAN HABER TENIDO RELACIONES CON ÉL

Los otros dos acusados que sí han declarado han negado, en contra de lo que sostiene la Fiscalía, que fueran ellos los que contactaran con el chico y han asegurado que fue éste quien acudió a ellos.

Uno de ellos, que cuando ocurrieron los hechos residía en Vitoria, ha relatado que la presunta víctima --que vivía en un municipio de la zona oriental de Cantabria-- contactó con él a través de un anuncio en la misma página web en las que ambos se anunciaban.

El acusado ofrecía sus servicios para dar "masajes eróticos", aunque "siempre" a mayores de edad, un "hobbie", según ha dicho, que usaba para sacar un dinero extra los fines de semana para poder independizarse de casa de sus padres.

Ha explicado que fue el chico "el que entró en contacto con él", le dijo que tenía 18 años y le propuso trasladarse a Vitoria para hablar con él. "No quedamos para relaciones sexuales", ha subrayado este acusado, que ha asegurado que el chico "no era su tipo" físicamente y ha añadido que "no le gustan los menores de edad".

El acusado ha señalado que, en la única cita que, según el, tuvieron, el chico se presentó como "prostituto", le contó que necesitaba dinero "de forma un poco acuciante" y le pidió que le ayudara pasándole algunos de sus clientes de los masajes eróticos.

Ha reconocido que ese mismo día le puso en contacto con uno de ellos --que es uno de los acusados que no ha querido declarar--, que esa noche pasó a buscar por casa del masajista al chico y se fue con él. Sin embargo, ha negado que acordara con él repartirse las ganancias.

El masajista ha explicado que cuando propuso a su cliente quedar con el chico, le dijo que era mayor de edad y éste "en todo momento le creyó". Además, ha afirmado que "sabe" que su cliente no tuvo sexo con el muchacho, que solo pasó la noche en su casa.

Otro de los acusados también ha negado que fuera él quien contactó con el chico por la web y ha explicado que éste se presentó en su peluquería para que le cortara el pelo.

Ha relatado que el chico le explicó que en su casa no sabían de su condición sexual y le pidió que le "ayudara a conocer gente". A raíz de esa visita a la peluquería, se intercambiaron los teléfonos y empezaron a hablar en ocasiones por WhatsApp. El acusado ha explicado que el chico le propuso quedar a tomar algo y "se le insinuó", aunque directamente no le ofreció tener sexo con él.

Este acusado ha asegurado que en ningún momento tuvo relaciones con él ni le pagara por sus servicios. De hecho, ha afirma que solo le vio una vez más y en la peluquería donde acudió a un tratamiento capilar.

Después de ello, ha explicado que un día, cuando se encontraba en la peluquería, se presentaron dos mujeres (una de ellas, la madre del menor) que le mostraron una foto del chico y le preguntaron si le conocía. Ha relatado que cuando les dijo que sí, le comenzaron a llamar "pederasta" y a amenazarle.

Además, según la versión de este acusado, cuando minutos después, acudió al cuartel de la Guardia Civil a denunciar lo ocurrido, volvió a ver al chico de lejos y a las dos mujeres y una de ellas le dijo: "no sabes lo que has hecho", "vas a pagar", "esto lo va a saber el juez, aunque si quieres el dinero lo soluciona".

El juicio está previsto que continúe este miércoles, 12 de febrero, con la declaración de testigos y peritos y concluya el jueves tras las conclusiones.