SEO/Birdlife ha habilitado una webcam para que los espectadores puedan seguir en directo, a través de su página web, a la única colonia de charrán común del Cantábrico, ubicada en la Bahía de Santander.

La iniciativa se encuentra dentro del proyecto de webcams que viene desarrollando SEO/BirdLife desde 2006, con el objetivo de acercar estas especies al público en general, según ha indicado la entidad en nota de prensa.

La webcam cuenta con la financiación del Gobierno de Cantabria, a través de las ayudas para programas de cooperación e investigación del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), y con la colaboración del Ayuntamiento de Astillero a través de su plan estratégico ecoAstilleroXXI, que ha cumplido 20 años y cuyo objetivo es promover la participación ciudadana en la conservación de la biodiversidad.

El charrán común nidificó por primera vez en la bahía de Santander en el año 1989, y tiene en esa zona su única población reproductora de todo el Cantábrico.

En el año 2009 comenzó su nidificación en las Marismas de Astillero gracias a la instalación de varias plataformas flotantes. Este tipo de estructuras de madera tres por tres metros, con un sustrato de grava y flotadores de poliestireno, se utilizan en diferentes lugares del mundo para la conservación de las especies de charranes, especialmente en lugares muy humanizados en los que la disponibilidad de hábitat de nidificación es limitada.

Esta temporada las Marismas Negras cuentan con cuatro plataformas flotantes que han sido montadas con ayuda de voluntarios en el marco del programa 'Provoca' de voluntariado ambiental del Gobierno de Cantabria. TRES DÉCADAS CONSERVANDO AL CHARRÁN COMÚN

SEO/BirdLife lleva "muchos años" trabajando en el estudio y conservación del charrán común en la bahía de Santander, una especie que estuvo a punto de desaparecer a principios de este siglo debido al deterioro de uno de sus primeros puntos de nidificación situado en la dársena sur de Raos. En el año 2.000, promovió la instalación de las primeras estructuras flotantes que permitieron consolidar la existencia de esta colonia.

Desde entonces, SEO/Birdlife lleva anualmente un seguimiento estandarizado con el objetivo de recabar información relativa a la evolución de la colonia, que ha permitido confirmar su evolución positiva, ya que en los últimos años "parece que se ha estancado en torno a las 30 parejas".

También se lleva a cabo un proyecto de anillamiento con anillas de lectura a distancia que contribuirá a mejorar el conocimiento de esta pequeña población. Hasta la fecha se han marcado 132 charranes y se han obtenido 67 recuperaciones de 26 ejemplares diferentes.