Hispania Nostra ha hecho un llamamiento a las autoridades competentes para que se proteja la capilla de San Lázaro con sus excepcionales pinturas murales, que en los últimos cinco años han sufrido "un alarmante deterioro", con "moho y humedades que amenazan con terminar de destruirlas".

Los orígenes del Lazareto de Abaño se remontan al siglo XIII, y su capilla es uno de los primeros vestigios del gótico en Cantabria. Fue leprosería y posteriormente fábrica artesanal de quesos.

A principios de este siglo, se desprendieron parte de las capas de cal de las paredes de la capilla y aparecieron unas vistosas pinturas formadas por dos barcos, un friso ajedrezado, diversos rosetones y una gran cruz sobre el altar, todas ellas realizadas en pintura roja.

Hispania Nostra señala que en 2003 obtuvo "un tímido reconocimiento", al ser registrado como bien inventariado. En 2012, el propietario del lazareto cedió la capilla de San Lázaro (lo más valioso del conjunto) al ayuntamiento de San Vicente de la Barquera.

En 2015, a la vista de que continuaba su "imparable abandono", fue incluido en la Lista Roja del Patrimonio de Hispania Nostra (www.listarojapatrimonio.org), que recoge cerca de 800 monumentos españoles que "corren el riesgo de desaparecer si no se actúa de inmediato".

En un comunicado de prensa, Hispania Nostra advierte que en cinco años han sufrido "un alarmante deterioro", por lo que pide que se proteja para evitar que el moho y las humedades que han aparecido en el último lustro terminen de destruirlas.