Profesionales de los servicios de emergencia autonómicos y del Estado han participado esta mañana en un simulacro de emergencias en Ontón, Castro Urdiales, donde se ubica la empresa Derivados del Flúor.

El ensayo forma parte del Plan de Emergencia Exterior diseñado por el Gobierno cántabro como preparación para cualquier eventualidad, aunque ha presentado "diferencias" con los realizados anteriormente, ya que en este caso ha contado con la participación de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y se ha coordinado con otra Comunidad Autónoma, ya que se ha informado del nivel 1 de emergencia al Gobierno vasco por una nube tóxica que se dirigía a Muskiz (Vizcaya).

Así lo ha destacado la consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández, que ha asistido a este ejercicio práctico que comenzó con la activación simulada del Centro de Coordinación Operativa (CECOP) en el 112, a las 10.00 horas.

Junto a la consejera han acudido también la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones y el teniente coronel de la UME, José Alberto Barja, entre otras autoridades.

En concreto, en la prueba técnica se simuló un accidente, una fuga de cisterna y una rotura de tubería que generó una nube tóxica posterior, provocando la activación de los protocolos de intervención y de asistencia a la población previstos en los planes de emergencia exterior.

En el operativo han participado técnicos de la Dirección General de Interior del Gobierno de Cantabria, el 112, 061, bomberos autonómicos y de Castro Urdiales, Policía Local y Nacional, Cruz Roja, la Delegación del Gobierno y la UME.

Las tareas que se han puesto a prueba han sido la jerarquía de mando, las comunicaciones, la movilización de los diferentes medios intervinientes, la activación de las sirenas de aviso a la población junto a las medidas de confinamiento y evacuación, la detección de los contaminantes y el balizamiento de las zonas afectadas.

La consejera ha señalado que este simulacro tiene diferencias con otros realizados, como la llegada de la UME, que se ha unido a todo el dispositivo de Guardia Civil Policía Local, 061, Cruz Roja y Bomberos, todos "perfectamente coordinados".

A su vez, la consejera ha explicado que otra novedad ha sido informar del nivel 1 de emergencia al Gobierno Vasco porque la nube tóxica se dirigía a Muskiz, por lo que "nos hemos coordinado con otra Comunidad Autónoma", con lo cual ha considerado el ejercicio como "muy completo y que se resuelve de manera satisfactoria".

Asimismo, ha agradecido a la UME su colaboración y ha destacado la implicación en lo referente a seguridad de las empresas químicas de la región.

EJERCICIOS

Durante este año se han puesto a prueba los planes de emergencia exterior diseñados para las empresas que trabajan con sustancias químicas y que establecen los recursos humanos y materiales precisos para resolver este tipo de emergencias, proteger adecuadamente a la población y la coordinación entre medios intervinientes.

Además de Derivados del Flúor, durante el verano se han realizado ejercicios prácticos en Alkion Terminals (Alkion), ubicada en el Puerto de Raos; en Solvay (Torrelavega), y en la empresa CEPSA. Otros simulacros se han desarrollado en Columbian y Dynasol, empresas ubicadas en Pontejos, y próximamente se realizará en Asturiana de Zinc (Suances).

En caso de accidente de escape químico, las medidas de protección más seguras son las tendentes al confinamiento y autoprotección en los edificios más cercanos y permanecer allí hasta la resolución de la emergencia. Además, se recomienda cerrar puertas y ventanas y no utilizar aparatos de ventilación exterior para evitar la entrada de posibles gases tóxicos.

También es importante no usar el teléfono, salvo que sea estrictamente necesario. Solo en caso de emergencia, llamar al 112.

En este tipo de sucesos, la información sobre la emergencia debe seguirse a través de los medios de comunicación y seguir las instrucciones y recomendaciones dadas por las autoridades a través de los canales y redes sociales oficiales.