Gijón, Román GARCÍA

La compañía de ferrocarriles Feve se vio obligada a cortar el servicio de transporte de viajeros por sus vías durante todo el día de ayer entre los municipios de Carreño y Gijón a consecuencia de un descarrilamiento que tuvo lugar a primera hora de la mañana. El convoy transportaba bobinas siderúrgicas y su salida de la vía fue muy aparatosa.

El suceso se produjo a las diez menos veinte de la mañana de ayer en las proximidades del apeadero de Aboño, en el límite de la parroquia de Gijón, en la frontera con Carreño.

Por causas que la propia compañía aún desconoce, tres de los vagones de un convoy descarrilaron, cortando la vía y dejándola inutilizada. El vehículo de Feve, que transportaba bobinas en un total de siete vagones, circulaba realizando un trayecto entre las estaciones de El Berrón y Aboño. Aunque no hubo que lamentar ningún tipo de daño personal, la vía quedó inutilizada y por ello a lo largo del día la compañía de ferrocarriles realizó transbordos de pasajeros por carretera entre las estaciones de Gijón y Carreño.

Los operarios de la compañía se pusieron a trabajar desde minutos después del suceso para poder restablecer el servicio con total normalidad y no causar molestias a los viajeros de las dos parroquias. Responsables de la compañía ferroviaria aseguraron que a última hora de ayer o bien esta mañana quedaría restablecido el servicio para los viajeros. Al cierre de esta edición seguían los trabajos.