La Consejería de Bienestar Social y Cruz Roja anuncia la próxima puesta en marcha de un teléfono gratuito para informar a las familias sobre la ley de Dependencia, gestionado por la Cruz Roja. Es todo un avance, en esta sociedad tan necesitada de ayudas sociales. Es muy loable que los dependientes puedan acceder al cuidado que necesitan.
Poner un teléfono gratuito es una obligación, para algo pagamos impuestos. Pero ¿por qué tiene que ser de Cruz Roja, y utilizando al voluntariado? ¿Por qué no se crea un servicio público? Asturias está en las cifras más altas del paro en España, es lamentable que nuestro Gobierno no lo contemple.
Mi oposición a la utilización del voluntariado para servicios esenciales se basa en dos razones fundamentales. En primer lugar, es una forma de contratar servicios baratos por parte de las administraciones públicas, eludiendo sus responsabilidades. El empleo generado entre el voluntariado suele ser precario y con bajos salarios, no existiendo un control público al respecto. En segundo lugar, considero que la medida contribuye a afianzar uno de los valores en que se asienta la injusticia social capitalista. La beneficencia y caridad de las ONG frente a la justicia social de los derechos garantizados por el Estado.
En relación con la economía y sin este nuevo servicio, sólo contando con los acuerdos entre la Consejería de Bienestar Social y Cruz Roja a día de hoy, hay más de trece convenios por más de 1.000.000 euros, y está pendiente otro convenio destinado a la teleasistencia de la dependencia por un importe de 276.000 euros más.
María Jesús Suárez
Avilés
