Mieres del Camino,

José A. ORDÓÑEZ

«Nuestra estrategia es la que nos marcan los 36 colectivos que forman parte de nuestra federación y ninguna otra». Con esta frase defendió, ayer, Agustín Álvarez Payo la «absoluta independencia» de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mieres, de la que es presidente. Y, a este respecto, añadió: «Lo único que hacemos y seguiremos haciendo es defender los intereses de los ciudadanos del concejo, independientemente de que coincidamos o no con una o con varias fuerzas políticas».

Álvarez Payo, acompañado de su junta directiva, salía así al paso de las críticas vertidas hacia la federación por el concejal socialista Rafael Perdiguer y por su portavoz municipal, Roberto Rodríguez. Ambos habían censurado que el colectivo vecinal pusiera en marcha «unas estrategias coincidentes con las de IU» y especialmente belicosas contra el equipo de gobierno, de manera «injusta» en varias ocasiones.

El presidente del movimiento vecinal quiso precisar que la federación «no está en contra de la nueva tasa de basuras en cocheras, sino de que se aplique el cobro retroactivo», asegurando que la sentencia judicial que esgrime el equipo de gobierno «no obliga necesariamente a aplicar tal medida». Además, anunció que el colectivo presentará, a las doce y media de este mediodía, un recurso administrativo en el Ayuntamiento para «solicitar la retirada inmediata de la retroactividad de este impuesto y la devolución de las cantidades que el Consistorio ha cobrado a los usuarios de forma indebida». Álvarez Payo emplazó a los afectados y al conjunto del vecindario a que «acudan a la plaza del Ayuntamiento a esa hora para mostrar su rechazo al planteamiento del gobierno municipal».

Por otra parte, los responsables de la plataforma que ayer respaldaron a Agustín Álvarez Payo criticaron con dureza que el alcalde, el socialista Luis María García, «no se ha dignado ni a contestar» su petición para «mantener un encuentro sobre diversos aspectos de interés para el municipio». A su juicio, «la mejor forma de limar esas asperezas de las que tanto habla el alcalde de Mieres es establecer cauces para el diálogo, pero, por lo que parece, el equipo de gobierno del PSOE no está dispuesto a ello, ni muchos menos».