Mieres del Camino,

Aitana CASTAÑO

La sangre no llegó al río, pero casi. Ocho voluntarios de Protección Civil de Mieres han reconsiderado su decisión de dimitir gracias a la mediación del alcalde del concejo, Luis María García, y del concejal Rafael Perfiguer. La crisis en el colectivo de voluntarios surgió el pasado sábado, tras las polémicas declaraciones del concejal del PP Elías Álvarez, quien aseguró «tener constancia de que algunos integrantes del colectivo habían conducido vehículos especiales sin tener el carné específico que les habilita para ello». Los representantes del grupo de voluntarios explicaron que «no nos gusta que nos utilicen políticamente y menos que mientan sobre cómo se funciona en Protección Civil, y eso es lo que han hecho», aseguraron, ayer, Tino Sanz, jefe de la agrupación, y el coordinador, Alberto Fernández Ortiz. «Todos los que estamos trabajando de voluntarios hacemos esto porque nos gusta, no queremos que nos den una palmada en la espalda, pero tampoco vamos a permitir que nos utilicen y nos vapuleen».

En la actualidad, Protección Civil de Mieres cuenta con 33 voluntarios. «Ocho de los cuales son conductores con los permisos necesarios», explicó Sanz.