Moreda (Aller),

L. CAMPORRO

El tramo del Corredor del Aller entre Moreda y Corigos sigue cortado a la altura de esta última localidad, debido al desprendimiento del talud que se produjo el pasado lunes por la noche. Aunque la calzada ya fue limpiada de piedras y roca, permanece cerrada por seguridad, en previsión de un nuevo desprendimiento, a la altura de las inmediaciones de la glorieta de Corigos.

El corte de carretera ha suscitado numerosas reacciones políticas en el concejo. Así, el concejal popular Juan Antonio del Peño aseguró ayer que el incidente está motivado porque «el tramo se inauguró con demasiada prisa, con taludes de excesiva pendiente y estratos fragmentados a causa de que en ese lugar existió una antigua explotación minera de carbón». A juicio del edil del PP, esta circunstancia «debió de haber sido tenida en cuenta en el momento de la ejecución de las obras del Corredor para la prevención de este tipo de argayos».

Del Peño asegura que «un problema similar» al de Corigos se produce en la zona situada encima de la glorieta de Campera, donde, según denuncia, «ya se registraron meses atrás varios e importantes derrumbes de escombros sobre la calzada». A su juicio, «esa circunstancia debe de ser tenida muy en cuenta antes de que se produzca un accidente».

Juan Antonio del Peño entiende que la situación «obliga a la Dirección General de Carreteras a realizar una inspección integral de todo el tramo de Moreda a Corigos, tomando las medidas necesarias en los puntos que aparezcan como peligrosos».