Pola de Lena,

C. M. BASTEIRO

El Ayuntamiento de Lena se ve obligado a gastar alrededor de 6.000 euros al mes en la reparación de los daños producidos por actos vandálicos en el mobiliario urbano. Los destrozos se producen, en su mayoría, en las zonas del extrarradio de Pola de Lena, como los paseos de Chencia y La Barraca.

Los mayores daños, según explicó el alcalde, Ramón Argüelles, se registran en «las farolas, las papeleras, los bancos y los contenedores», lo que supone «un gasto desmesurado». Desde el Ayuntamiento se destaca que la reposición de cada papelera dañada supone un gasto de 200 euros, mientras que los bancos pueden ascender hasta 300 euros. Mismo precio el de las tulipas de las farolas, a lo que hay que añadir el coste del cableado en ocasiones ha sido robado. Asimismo, el gasto se dispara si hay que cambiar las marquesinas de los autobuses, con un coste de más de 2.000 euros.

Tampoco se libran los contenedores de basura. De hecho, el regidor manifestó tener constancia de que «hay vecinos que se están dedicando a quemar estos contenedores a altas horas de la madrugada», con un coste de 500 euros por cada depósito a reponer. Argüelles se mostró preocupado por unos actos vandálicos que «son denunciables». La Policía Local detuvo a dos jóvenes del concejo hace unas semanas «por arrancar señales en uno de los paseos de La Pola». El alcalde recalcó que el Consistorio «ha hecho un gran esfuerzo para dotar al concejo de un equipamiento urbano moderno y práctico, por lo que no nos parece aceptables estas acciones».