Soto (Aller),

C. M. BASTEIRO

La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) acometerá la reparación de la escollera de Soto, que resultó dañada por la crecida del río Aller durante el temporal de lluvias de febrero. El organismo de aguas cuenta con un informe técnico que señala que las obras del Corredor del Aller, ejecutadas por la Consejería de Fomento, modificaron sin permiso el cauce del río y propiciaron el deterioro de la escollera. La obra tendrá un carácter subsidiario, por tanto, y tendrá que ser abonada por el Principado de Asturias.

El alcalde del concejo, David Moreno Bobela, explicó ayer que la Confederación se puso en contacto con el Ayuntamiento para hacer el anuncio de la actuación. El regidor señaló que fue la Administración local la que se encargó en un primer momento de dar respuesta a la demanda vecinal, con una serie de trabajos que ofrecieron un arreglo provisional y sirvieron para evitar la inundación de las viviendas más cercanas al cauce del río.

Durante el temporal, los Gobiernos central y regional emprendieron un cruce de acusaciones por la responsabilidad de la obra. El viceconsejero de Fomento, Juan Vega, acuso a la Delegación de Gobierno de «echar balones fuera» con las obras del temporal y reclamó a la Confederación la puesta en marcha de una actuación de reparación. El PP, por otra parte, culpó a las obras del Corredor del Aller de los daños en la escollera y, finalmente, el informe técnico del organismo de aguas dio la razón al Gobierno central.

La crecida del río en Soto se llevó por delante 75 metros de escollera y amenazó con inundar varias casas de la localidad. Los vecinos del pueblo llevan meses reclamando también que se acometa la obra del acceso definitivo. A día de hoy, los vehículos pesados acceden al pueblo a través de un paso provisional que se habilitó por la obra del Corredor del Aller.