Santa Eulalia, P. C.

Los ríos de Morcín y Riosa vuelven a estar llenos de vida. Miembros de la nueva Asociación de Pescadores de Riosa y Morcín (Asprimo) repoblaron durante la mañana de ayer los cauces de los dos concejos con cerca de 30.000 alevines de trucha común procedentes del centro ictiogénico de Cabañaquinta.

Los responsables del colectivo destacaron que hacía años que no se realizaban sueltas de alevines en los ríos de Riosa y Morcín y que era necesario repoblar los cauces sobre todo debido a las consecuencias del vertido de pintura y productos de limpieza que se produjo en agosto del pasado año en el río Llamo y en el que murieron cerca de 3.500 truchas. Para compensar esas bajas y recuperar la vida piscícolas de ríos como el Llamo, el Morcín y el Riosa, la asociación Asprimo solicitó ayuda al Principado para obtener los alevines y sus socios soltaron ayer en distintos puntos de los cauces cerca de 30.000 alevines de trucha común. Los alevines procedían del centro ictiogénico que la Real Asociación Asturiana de Pesca Fluvial tiene en la localidad allerana de Cabañaquinta. De allí salió ayer varias veces la cuba llena de peces con destino a los cauces fluviales de Riosa y Morcín; pero también a otros ríos de la comarca como el Caudal y el Turón.

Estas repoblaciones se suman a las realizadas la semana pasada por la asociación de pescadores «El Maravayu» en el municipio de Aller. Los pescadores soltaron cerca de 450.000 alevines de trucha común en tramos de los ríos Aller, San Isidro y Negro.