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Amicos cocina desgravaciones

El Ministerio del Interior declara de "utilidad pública" la entidad mierense, y sus benefactores dispondrán de ventajas fiscales

El local de la placina de Santa Marina cedido a Amicos. J. R. SILVEIRA

La Asociación Mierense de la Cocina Solidaria (Amicos) tendrá desde ahora un incentivo más para poder hacer socios y recibir donaciones que le permitan seguir desarrollando la gran labor altruista con la que sirven comidas a los más desfavorecidos del concejo. El colectivo acaba de ser declarado de "utilidad pública" por el Ministerio del Interior, lo que significa que tendrá ventajas fiscales que no sólo disfrutará la propia asociación, sino todos sus socios y benefactores. Esta declaración llega además en un momento crucial para Amicos, que necesita realizar una potente inversión económica para adaptar el nuevo local al que se mudarán en unos meses, en la placina de Santa Marina.

El presidente del colectivo, Carlos Muñiz, señalaba ayer que "para nosotros es muy importante, porque ahora vamos a necesitar mucha ayuda y esto puede suponer un incentivo para nuestros benefactores". El responsable de la cocina solidaria de Mieres explicó que hace ya un año que comenzaron la tramitación ante el Gobierno para que la asociación se declarase de utilidad pública: "llevó un trámite largo porque hay que presentar muchos papeles y balances para justificar que somos un colectivo que nos dedicamos a un fin social y que no hay ánimo de lucro".

Según explicó Muñiz, a partir de ahora, Amicos deberá presentar cada ejercicio sus balances económicos al Ministerio de Hacienda e identificar a sus socios y benefactores. Estos podrán, a su vez, solicitar una deducción por las cantidades que hayan aportado al colectivo. "Normalmente esto se le concede a asociaciones más grandes como por ejemplo Cruz Roja o Cáritas, pero ahora todas las personas que colaboren con nosotros podrán beneficiarse de algún modo también", indicó Muñiz.

Amicos afronta ahora un importante reto con el cambio de sede. El local que poseen en la calle Clara Campoamor se les había quedado pequeño, y el Ayuntamiento les cedió otro espacio mayor en la placina de Santa Marina. Sin embargo, para adecuarlo es necesaria una obra de envergadura. "Queremos hacer una cocina mucho más industrial y moderna, y para eso necesitaremos una buena inversión", señala Muñiz, que espera que con las deducciones fiscales que conllevarán las donaciones a Amicos, se consiga la ayuda suficiente como para realizar la obra cuanto antes.

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