La puesta en funcionamiento de la parada de taxis del nuevo hospital Álvarez Buylla, en Mieres, fue recibida ayer con satisfacción por los profesionales del sector y por los vecinos. El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mieres, Ángel Luis Rubio, remarcó, eso sí, "que la parada tenía que estar abierta desde el primer día, porque ha sido un retraso de más de un año totalmente innecesario que sólo ha perjudicado a los habitantes de Mieres". Rubio manifestó su esperanza de que este estacionamiento "no suponga el enfrentamiento entre los profesionales del taxi y que el Ayuntamiento de Mieres vele por su buen funcionamiento".
Las peticiones del presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos vienen motivadas por el hecho de que esta parada fue el germen de una polémica entre los taxistas del casco urbano y los del extrarradio. El conflicto derivó en la modificación de la ordenanza que regula al sector e iguala a todos los profesionales. También llegó una demanda judicial contra la norma. La Asociación Sindical de Taxistas Autónomos de Mieres (Astam), integrados la mayoría en Radio Taxi Mieres, son los únicos que encabezan esta denuncia, ya que la otra cooperativa que trabajaba en el casco urbano decidió desistir y apoyar al Ayuntamiento, al igual que los taxistas del extrarradio. Ignacio Suárez, presidente de Astam, señaló que "cada uno sabe de sus intereses profesionales, aunque incongruente que al principio nos diesen la razón y ahora hayan decidido salirse del proceso".
Sobre la parada del hospital de Santullano, el presidente de Astam manifestó su "alegría" por contar con este espacio, aunque criticó que el Ayuntamiento no dio aviso de su apertura.
Héctor González, que representa a los taxistas del extrarradio, también se mostró "contento" por la apertura de la parada y aseguró que defenderá al Ayuntamiento en la demanda contra la ordenanza municipal. "Y somos mayoría", subrayó.
