Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

El equipo de gobierno de Siero ha colocado dos nuevas cámaras de seguridad en los edificios municipales, que se suman a las cuatro ya existentes en el Ayuntamiento. Pero en esta ocasión hay una novedad. Las cámaras se han instalado para vigilar el interior de las dependencias municipales.

Esta circunstancia ha provocado duras críticas tanto de los representantes sindicales, que ayer protagonizaban una nueva manifestación por las calles de Pola de Siero, con un corte del tráfico en la calle Alcalde Parrondo, como cada martes, como de los representantes del PP.

Una de las nuevas cámaras instaladas se ha ubicado a la entrada del Consistorio, frente a la cabina en la que un trabajador atiende al público. Otra, en el edificio de Urbanismo, junto a la máquina expendedora y la máquina de café que están junto a las puertas de los servicios. Esta segunda cámara ha provocado, en primer lugar, la inevitable comparación con «Camera café» que corría ayer por todas las conversaciones y, bromas aparte, el cuestionamiento de su validez por parte de los representantes sindicales, ya que, al estar junto a los servicios, podría estar contraviniendo las leyes que protegen la intimidad de las personas.

Por su parte, el concejal del PP Luis Vázquez solicitó, en primer lugar, «que se advierta claramente a los vecinos de la instalación de estas cámaras, porque puede haber personas que sean grabadas contra su voluntad; incluso se pueden grabar niños». Asimismo, en este sentido, pidió al equipo de gobierno que aclare «si puede asegurar un buen uso de las grabaciones, quién las controlará y si se almacenarán o se destruirán tales grabaciones».

Vázquez destacó el hecho de que se coloquen «cámaras para vigilar a los empleados» cuando la mitad del equipo de gobierno está formada por sindicalistas. «No queremos pensar lo que hubiese dicho el PSOE si el PP hubiese adoptado estas medidas».

En cualquier caso, el concejal considera que esta decisión es «una nueva provocación a los empleados municipales, que contribuirá a aumentar aun más el ambiente de desconfianza en el que se desarrollan las relaciones entre los trabajadores y el equipo de gobierno desde hace varios meses». Vázquez opinó que «esta provocación se une a otras anteriores, como la amenaza a los trabajadores de quitarles los complementos de productividad o la denuncia de varios empleados por desórdenes públicos». En relación con esta última cuestión, para el concejal popular «sería bueno saber si el equipo de gobierno municipal pedirá a la Delegación de Gobierno que retire las denuncias por desórdenes públicos contra los tres trabajadores municipales llamados a declarar el pasado viernes 23 -día de Santa Rita- ante el titular del Juzgado número 2 de Siero».

El edil cree que «el PSOE de Siero debería adoptar una postura clara». En su opinión, «no puede seguir desentendiéndose de la crítica situación de nuestro Ayuntamiento». Lo que debe hacer, a su juicio, es «apoyar explícitamente las acciones del equipo de gobierno -que hasta ahora han sido contraproducentes- o proponer una estrategia alternativa que ayude a resolver el conflicto».