El concejo de Cabranes acogerá, el próximo 7 de junio, un acto de hermanamiento entre cofradías que pretende aunar el amor y la devoción por la Virgen María. La Cofradía de Nuestra Señora de la Virgen de Torazo se unirá a las cofradías de la Virgen del Viso de Salas y de Nuestra Señora del Cébrano de Teverga en un proyecto mariano que pretende reforzar la unión dentro de la diócesis asturiana. También se busca la colaboración entre las tres cofradías que desarrollan una extensa labor social y religiosa.

V. DÍAZ PEÑAS

Torazo (Cabranes),

Los actos tendrá lugar a partir de las doce y media en el núcleo de Torazo. Será el momento de la llegada de los cofrades y del recibimiento de los participantes y peregrinos. A la una y cuarto está prevista la eucaristía, concelebrada y presidida por el vicario de asuntos jurídicos y económicos de la archidiócesis de Oviedo, Andrés Pérez Díaz. El acto oficial de la firma del triple hermanamiento se realizará a las dos menos diez, al entregarse diez actas en pergamino a cada cofradía firmadas en original por el propio vicario, los hermanos mayores y secretarios de las tres cofradías participantes.

Tras el acto oficial del hermanamiento se celebrará una procesión conjunta de las cofradías de Torazo, Salas y Teverga que los llevará desde la iglesia parroquial hasta la capilla de la Sienra, situada a unos 200 metros de distancia. Tras ésta se celebrará una comida de hermandad a base de productos típicos de Cabranes organizada por la Cofradía de Nuestra Señora del Carmen de Torazo. El regreso de los participantes a sus lugares de origen está previsto para las seis de la tarde. Los organizadores pondrán a disposición de los cofrades autobuses para poder llegar a Cabranes y participar activamente en los actos.

Con este acto se complementará un hermanamiento que nació el pasado 26 de abril. En aquella ocasión, la Cofradía del Viso y la del Cébrano se unieron para avanzar en el culto a la Virgen. Ahora se une a este proyecto mariano la Cofradía de Torazo, que guarda un amplio legado histórico. Según consta en el Libro de Fábrica de la Cofradía, sus inicios hay que buscarlos en el año 1600. Tiene unos seiscientos cofrades, y al igual que sucede en la cofradía del Viso, sus miembros se suman a la cofradía familiarmente y esta pertenencia pasa de padres a hijos.