Bandujo (Proaza),

V. DÍAZ PEÑAS

La Consejería de Cultura está ultimando lo que será la declaración del pueblo de Bandujo, en Proaza, como bien de interés cultural con la categoría de conjunto histórico. La pasada semana la Comisión Permanente del Consejo del Patrimonio Cultural de Asturias informó favorablemente sobre la declaración, con lo que ya sólo quedan dos trámites para que dicha declaración se consume, como explicaron desde la Consejería.

El inicio formal de este expediente que busca declarar bien de interés cultural este núcleo medieval de Proaza comenzó en noviembre de 2008. Desde ese momento, aseguran desde Cultura, se han seguido los trámites necesarios y ahora sólo se está a la espera de que el Pleno del Consejo ratifique el informe aprobado por la Comisión Permanente del Patrimonio. El último paso será la aprobación de un decreto del Consejo de Gobierno del Principado, tal y como señaló la consejera, Mercedes Álvarez, durante una visita a Bandujo.

Como se apunta desde el área de Cultura del Principado, el pueblo de Bandujo es un ejemplo «excepcional» de aldea asturiana que ha conservado a lo largo del tiempo sus características fundamentales sin graves alteraciones. De ahí que la Consejera señalase que por esta razón el núcleo proacín cuenta hoy «con un conjunto patrimonial de gran importancia». De hecho, tiene una de las torres defensivas bajomedievales mejor preservadas de Asturias, así como un variado número de viviendas y construcciones auxiliares de distintas épocas.

Para el alcalde de Proaza, el socialista Ramón Fernández, la inminente declaración de Bandujo como bien de interés cultural (BIC) es todo un orgullo. No sólo será el primer bien de este tipo con el que cuente el concejo, también será una manera de reconocer y difundir la importancia turística e histórica que tiene este núcleo. «El pueblo ya es de por sí visitado, pero esto será un aliciente tanto para Bandujo como para Proaza. Ahora esperamos que se aproveche el tirón y que se puedan crear plazas hosteleras en la zona, donde aún no las hay», comentó Fernández.

El regidor proacín también habló de los pros y los contras que traerá la declaración de BIC. En este sentido, apuntó que habrá más restricciones urbanísticas, pero también más ayuda e inversión para mantener y mejorar el pueblo medieval y su entorno.