Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

La Comisión de Urbanismo ha dado luz verde a la reforma de la plaza de La Baragaña, de Candás, de acuerdo al proyecto ganador del concurso de ideas para tal fin. Ahora, el Ayuntamiento de Carreño podrá sacar a concurso las obras, por lo que los trabajos podrían comenzar en los primeros meses de 2010, según aclararon desde la concejalía de Urbanismo. Este proyecto, de nombre «Devónico», se ajustó, como los demás 23 proyectos presentados, al presupuesto máximo permitido por el Ayuntamiento, que es de 300.000 euros.

El arquitecto ovetense Miguel García-Pola fue el ganador del certamen para reformar la plaza con un proyecto innovador que mantendrá la configuración del lugar, integrándolo en el conjunto de La Baragaña alta, potenciando sus usos sociales y habilitando nuevos espacios en su parte subterránea.

El proyecto «Devónico» -nombre que corresponde al cuarto período de la era paleozoica, hace ya 400 millones de años y cuya roca ha inspirado al autor- se fundamenta en tres aspectos. Por un lado, incorporará la plaza, manteniendo su estructura triangular, al conjunto de la zona, concretamente a las calles Braulio Busto y Valdés Pumarino, así como a la plazoleta de la farola y a La Baragaña alta, junto al Polivalente.

Para ello, el autor del proyecto ha fijado la plataforma triangular de La Baragaña, pero con un entorno difuminado de los bordes. Eso supondrá que la actual división que existe entre la actual plaza y su entorno, basada en los desniveles con las calles Braulio Busto y Valdés Pumarino, se verá reducida, así como desaparecerá la barandilla que la separaba de esta última. El objetivo es que La Baragaña se acomode al nuevo aspecto que presenta en la actualidad la parte alta de la plaza, tras la construcción del edificio polivalente y la reforma de su entorno. No habrá dos plazas de La Baragaña, sino una.

También se crearán nuevos espacios a causa de la reforma. En el desnivel de la plaza hacia la calle Braulio Busto se construirá un local semienterrado, en la zona de máxima pendiente, junto a las escaleras de acceso a la plaza, donde se obtiene un espacio amplio que podría servir para la creación de una oficina de información turística, según la propuesta del autor. La tercera gran apuesta del proyecto de futuro para La Baragaña tiene que ver con el uso que de ella se hace.

El aspecto interior se mantendrá tal cual, ya que tiene una gran funcionalidad en su configuración actual, sirviendo como parque de juegos, como espacio para la Banda de Música de Candás o algunas otras actividades.

Sin embargo, el cambio radical lo ocasionará la instalación de un mobiliario moderno, adaptado a todas las edades, y, sobre todo, la creación de una nueva escalinata en el pico del triángulo de la plaza. Esta escalinata trata de potenciar su uso como foro público, lugar de tránsito y detenimiento.