Grado,

Izquierda Unida (IU) de Grado argumenta que la decisión de Asturagua, concesionaria del servicio de aguas en Grado, de automatizar la estación de tratamientos de aguas (ETAP) de Riviellas «no favorecerá la mejora en la calidad del agua, ni beneficiará a los ciudadanos». Según la coalición, «esta actuación sólo servirá para eliminar los dos puestos de trabajo de los operarios que controlan in situ la calidad del agua. Por tanto, quien se beneficia realmente es la empresa, que elimina gastos».

El portavoz de IU, Arcadio Álvarez, afirmó que «desde su puesta en marcha, el servicio municipal de agua funcionó de forma impecable, tanto en cuanto al servicio ofrecido como a la calidad del agua. Pero todo se vino abajo a partir de la privatización del servicio». Según el edil de la coalición, «en el último año y medio los usuarios han sufrido subidas injustificadas de precio, cobros de más en las facturas, contaminación de la red con gasóleo, reiterados cortes de agua...». Álvarez lamenta que «no haya habido un solo reproche del gobierno municipal hacia la empresa, en defensa de los derechos de los vecinos».