Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

Los tres concejales liberados del Ayuntamiento de Carreño verán reducidos sus emolumentos a partir del próximo mes de junio. Según acordó el Pleno celebrado ayer en Candás, el alcalde, Ángel Riego, cobrará en la próxima nómina un 7 por ciento menos; la teniente de Alcaldía, Áurea Gutiérrez, un 5 por ciento, y la concejala de Urbanismo, Melania Álvarez, un 6 por ciento. Los grupos, con el voto a favor del gobierno y del PP, acordaron de esta manera aplicar con carácter inmediato las recomendaciones de la Federación Española de Municipios (FEM), realizadas el pasado día 25, para acompasar la rebaja en los sueldos de los políticos a la de los funcionarios.

La decisión no estuvo exenta de polémica, ya que previamente a la votación de la recomendación de la FEM, Unión Independiente de Carreño (UICA) y Unidá Nacionalista Asturiana (UNA) habían presentado una moción para que los sueldos, así como las dietas por asistencia a plenos y comisiones de todos los concejales, fueran rebajados en un 20 por ciento. Esta medida fue rechazada por todos los grupos, salvo los que la propusieron.

«Un funcionario y un político no son lo mismo, y ambos no son responsables de igual manera de la crisis», explico Ramón Artime, portavoz de UICA, para justificar su postura de que la rebaja fuera mayor, añadiendo que «los funcionarios no tienen por qué pagar la crisis en la misma medida que un político, aunque sus sueldos se asemejen». A juicio del concejal independiente, «si el Alcalde pasa de cobrar 46.000 a 38.000 euros no le va a suponer ninguna quiebra personal ni familiar, y sería un ejemplo en los tiempos que corren».

Áurea Gutiérrez, concejala municipal de Hacienda, recordó al defender la postura del gobierno que «en 2009, cuando a los funcionarios se les subió un 2 por ciento, los liberados de Carreño se congelaron el sueldo, y este año se bajará también». Además, y en cuanto a las dietas que cobran todos los concejales por acudir a comisiones y a plenos y que es de 50 euros, se verán reducidas en un 10 por ciento.

Por otra parte, ayer se produjo la dimisión de la concejala de Educación y Turismo del PSOE, María Dolores Aramendi. La edil argumentó su renuncia explicando que «se debe a un asunto de incompatibilidad profesional», ya que en los próximos días se incorporará a un nuevo puesto de trabajo en otro Ayuntamiento asturiano. De esta forma, la concejala pretendía desligar su marcha de su inclusión en el informe del fiscal sobre la alteración de la tramitación de multas en el Ayuntamiento. Una de las multas cuya tramitación fue dilatada era precisamente de Aramendi, que ayer precisó que «la sanción se pagó finalmente».