El prau de Salcedo, escenario de la romería del Xiringüelu, presentaba ayer la típica imagen del día después, con la mayoría de casetas destrozadas y mucha basura por recoger. El alcalde de Pravia, Antonio de Luis Solar, destacó que la fiesta, celebrada el domingo a orillas del río Nalón, «transcurrió dentro de la normalidad y, afortunadamente, no hubo que lamentar incidentes graves, lo que deja claro que los dispositivos de seguridad han funcionado». El despliegue de medios fue amplio y se coordinaron la Guardia Civil, Policía Local y Bomberos de Asturias, así como personal del equipo de buceo de la Benemérita para evitar accidentes en el río. El regidor socialista destacó también «la gran afluencia de público» y «el comportamiento ejemplar de los ciudadanos que participaron en el evento». En las imágenes, dos detalles del prau Salcedo, ayer al mediodía, informa L. VALDÉS.