Posada de Llanera,

Gonzalo BENGOA

Una reunión mantenida ayer entre el director general de Carreteras, Transportes y Asuntos Marítimos, Julián Bonet, y la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) evitó «in extremis» la suspensión del servicio de autobuses lanzadera que enlaza desde hace tres años con los complejos industriales de Llanera.

El Consorcio de Transportes de Asturias (CTA) había decidido la suspensión «temporal» del servicio, claramente deficitario, una decisión que incluso había anunciado en su página web. Sin embargo, los representantes del Principado y los empresarios de los polígonos del área central decidieron tras el encuentro prorrogar el servicio mientras se estudia una fórmula económica para hacerlo menos gravoso.

El presidente de la Asociación de Empresarios del Polígono de Silvota (Asemposil), Pablo García-Vigón, explicó ayer a LA NUEVA ESPAÑA que la propuesta de los empresarios es dejar una única lanzadera de autobuses. «Con esta propuesta se abarataría el coste del servicio, situándose entre los 70.000 y los 80.000 euros al año», apunta García-Vigón, que considera que «esta cantidad sería perfectamente asumible para un servicio público de interés». El presidente de Asemposil afirmó que la decisión de suprimir temporalmente el servicio de lanzadera a los polígonos industriales de Silvota, Asipo y el Parque Tecnológico de Asturias había sido «precipitada e inapropiada».

El director general de Carreteras, Transportes y Asuntos Marítimos, Julián Bonet, confirmó ayer que el servicio de lanzadera a los polígonos industriales de Llanera no se suprimirá y que había visto «mejor voluntad e interés» por parte de los empresarios para llegar a un acuerdo. «Entre todos vamos a mantener el servicio, a pesar del coste», sentenció Bonet. Según los datos del CTA, son unas 140 personas diarias, sumadas la ida y la vuelta, las que utilizan las lanzaderas de autobuses a los polígonos industriales de Llanera y la inversión del servicio durante sus tres años de duración ha sido cercana al millón de euros.