Candás,

B. FERNÁNDEZ

La paralización de las obras de construcción del museo de la pesca y la conserva en la antigua fábrica de Ortiz de Candás responde a una falta de previsión por parte del gobierno de PSOE e IU, según manifestó ayer Ramón Artime, portavoz de la Unión Independiente de Carreño (UICA), en la oposición.

Artime aseguró que «las obras del museo de la conserva son fruto de la improvisación, ya que el gobierno no creyó en ellas desde el primer momento; su comienzo se dilató por inoperancia y ahora empiezan en plena crisis sin tener resueltos ni la financiación ni los contenidos».

A este respecto, el líder de los independientes sostiene que, «en el tema de Ortiz, llueve sobre mojado porque son varios los casos negativos que han envuelto a este proyecto, como, por ejemplo, el inventario que realizaron en su día, que costó mucho dinero y que ahora habrá que volver a hacer». El hecho de que el gobierno «empiece una obra sin tener dinero para terminarla» evoca a los integrantes de UICA «al caso de la Ciudad de Vacaciones de Perlora, que comenzó de igual manera y ya sabemos cómo acabó».

A juicio de los independientes de Carreño, «el problema de fondo es que el proyecto del museo no está bien definido y aún hoy se desconoce el contenido del mismo». Artime, en su análisis de la paralización de los trabajos del museo, advierte situaciones «extrañas», como el hecho de que, «cuando apenas han comenzado las obras, ya haya desavenencias entre la empresa y la dirección de obra».

Acerca de la indefinición de los contenidos, el PP también suscita dudas. «Esperamos que la fábrica quede de forma que pueda modificarse el contenido en el futuro, porque no creemos que sea adecuada la construcción de un museo y sí de un auditorio», explicó el portavoz de los conservadores, Celestino Gutiérrez. Acerca de la paralización de los trabajos en Ortiz, el popular señaló que «cabe esperar que se solucionen los problemas, máxime sabiendo que la empresa que los lleva a cabo, Contratas Iglesias, es seria, solvente y de prestigio».

El estancamiento de los trabajos se debe, según explicaron fuentes del gobierno local, a la existencia de diferencias de índole técnica y económica entre el Ayuntamiento y la empresa Contratas Iglesias.