Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

La salud de las playas de Carreño es buena, siempre y cuando no se tengan en cuenta los datos de la de Xivares. Cruz Roja, encargada del socorrismo en los arenales del concejo, acaba de elaborar la memoria de la recién finalizada temporada de baños, y de ella se desprende que Xivares es la oveja negra de la rasa carreñense. Dos días hubo que cerrarla al baño, con bandera roja, por vertidos de aguas fecales; pero es que de los 93 días que duró la temporada de baños, sólo tuvo bandera verde en dieciocho ocasiones, siendo el resto amarilla.

No solamente eso, sino que fue la playa que más trabajo dio a los socorristas. En todo el verano se realizaron treinta y cinco rescates por parte de los vigilantes en Carreño, de los cuales veintidós, más de la mitad, fueron en Xivares, nueve en Carranques y cuatro en Candás.

El resumen de incidencias señala, además, que no fue necesaria la intervención de helicópteros en todo el verano, pero sí de ambulancias para realizar el traslado de heridos a centros hospitalarios, en cinco ocasiones, dos en Xivares, las mismas que en Perlora, y una en Candás. Las embarcaciones marítimas actuaron seis veces en Palmera y cinco en Carranques. La incidencia más común fue la de heridas y contusiones: 409 en total. Hubo once niños perdidos en todo el verano, cinco cortes de digestión y los socorristas dieron parte de «cuerpos extraños» en los ojos de 54 bañistas, según los datos facilitados por Cruz Roja.

Dice el informe sobre la playa de Xivares que «las incidencias más destacables fueron los problemas ocasionados por las fuertes corrientes, así como la zona de la ría, lugar sin vigilancia, con agua muy caliente y bañistas de avanzada edad».

Además, el verano carreñense contó también con el fallecimiento de una persona, aunque se produjo en un pedrero situado al lado de la playa de Palmera y fuera de la zona de control de los socorristas.