Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

El Ayuntamiento de Siero estudia aplicar en Pola de Siero la llamada «Zona 30», una semipeatonalización con limitación de velocidad con cuya pretensión última es mejorar la calidad de las calles para los peatones sin restringir totalmente el paso de vehículos.

El alcalde de Siero, el socialista Guillermo Martínez, ha encargado a la Policía Local que estudie qué calles podrían ser objeto de estas restricciones para, en un futuro próximo, acometer el cambio. En un principio, adelantó, las calles afectadas «no van a ser muchas». También indicó que todavía no está claro cuáles de las calles serán las más adecuadas para comenzar con el proyecto.

El equipo de gobierno planteó aplicar la medida en otras localidades, pero llegó a la conclusión de que Pola de Siero «es la que mejor se adaptaría a ese tipo de vías».

En Lugones, donde también se había barajado la «Zona 30», la aplicación de esta restricción «podría ser contraproducente» por lo que respecta a la contaminación, según el Alcalde, ya que, al menos en la actualidad, la densidad del tráfico podría ser excesiva y no tendría una alternativa adecuada.

La aplicación de la «Zona 30» forma parte de la apuesta del equipo de gobierno municipal por lo que Guillermo Martínez califica de «infraestructuras que den más servicio al ciudadano», con más atención hacia los peatones.

A ella podrían sumarse otras iniciativas, como los carriles bici. Martínez también se refirió a la necesidad de hacer una nueva regulación de los semáforos en algunas zonas, especialmente en Pola de Siero, donde se están registrando problemas en la fluidez del tráfico, como en el acceso a la plaza Pablo Iglesias desde la calle Falo Moro.

El Alcalde indicó que es consciente de que en las actuales circunstancias económicas no se podrán hacer a corto plazo muchas de las obras requeridas para acercar la localidad al peatón, pero confía en que en unos años sea posible.

Por otra parte, se refirió a los crecientes problemas de estacionamiento en los principales núcleos del concejo y a la iniciativa del equipo de gobierno municipal de habilitar varios aparcamientos disuasorios en Lugones y en Pola de Siero. Con respecto a esta última localidad, el mandatario aseguró que el municipio tiene ya muy avanzadas las gestiones para contar con nuevos espacios.

Son medidas que, sin solucionar definitivamente el problema del tráfico, que no sólo es urbanístico sino que también obedece a otras causas, como la propia actitud de los conductores, habrán de contribuir a mejorar, si no la circulación, sí, al menos, la calidad de vida.