Nava,

Mariola MENÉNDEZ

La Comarca de la Sidra homenajeó ayer, en Nava, a las mujeres, coincidiendo con la conmemoración internacional del 8 de marzo. En concreto, premió el trabajo, a veces demasiado desconocido e infravalorado, a pesar de ser fundamental en la pesca, que realizan las rederas.

El galardón recayó en tres profesionales de Lastres, María Teresa «Teté» Costales, Margarita García y Belén Candás, por su «perseverancia, tesón y lucha», según resaltó la concejala naveta de la Mujer, Belén Fernández.

Pero este reconocimiento también persigue dignificar este oficio con miras a mejorar las condiciones laborales. Además, las de Lastres fueron junto con las de Luarca las primeras que constituyeron la única asociación de rederas de bajura de Asturias. La propuesta de que el premio esta edición, que anualmente concede el Consejo Comarcal de la Mujer de la Comarca de la Sidra, recayera en Teté Costales, Margarita García y Belén Candás la realizaron dos asociaciones, Fuente Obaya y Fuente La Regalina.

Las tres recogieron el premio muy agradecidas. Consideran que es «una oportunidad de dar a conocer el oficio en otra tierra que no sea la costa», explica Costales. Aseguran que están demasiado acostumbradas a tener que explicar en qué consiste su trabajo. «Te preguntan qué es eso de rederas y queremos que se valore nuestra labor», que en el caso de Teté Costales viene desarrollando desde hace unos quince años. «Soy redera, mujer que arma redes», suele ser una respuesta bastante recurrente.

Costales asegura que no se inició en este oficio por tradición familiar. El casarse con un pescador fue la razón que la llevó a dedicarse a esto, al darse cuenta de que se trataba de una tarea esencial.

«Aunque de esto no vives, sin rederas no habría pescado. Es un trabajo artesano manual que no hace ninguna fábrica. Sabes que no vas a ganar mucho, pero eres parte imprescindible de la mar». Por eso estas mujeres tienen claro que su lema es: «Queremos ser visibles». El premio viene a reconocer un trabajo en ocasiones no tan reconocido como se merece porque sin redes no hay capturas.