Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

La actividad del área de Urbanismo de Siero derivada de la iniciativa privada se ha adelgazado enormemente debido a la coyuntura económica desfavorable, y la mayoría de lo que sale adelante viene de la iniciativa del propio Ayuntamiento, de las actuaciones urbanas que va desarrollando en las distintas localidades del concejo. La concejala de Urbanismo y Medio Ambiente, Engracia Valle, destaca el hecho de que, hasta hace bien poco, las comisiones de Urbanismo «llevaban hasta setenta puntos en el orden del día, y ahora no llegan a veinte». De hecho, en el orden del día de la última comisión sólo hubo 14 puntos.

Lo que más se está notando es la caída en el área de planeamiento, donde se desarrollan los expedientes más complejos, como planes parciales u otras figuras que desarrollan el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que afectan a territorios con varios propietarios.

Estos expedientes requieren, en muchos casos, la intervención de organismos supramunicipales como la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA) o la Dirección General de Carreteras. Muchas veces obligan a abrir procedimientos con expropiaciones y, lo más importante, suelen necesitar grandes inversiones. Es esta capacidad inversora la que falla y la que hace que se hayan dejado de desarrollar.

También es muy significativo el descenso en licencias de construcción de edificios de viviendas. «Tan sólo las viviendas unifamiliares tienen un cierto tirón, aunque su construcción no es, ni mucho menos, al ritmo de antes», apunta la edil.

Por otra parte, han aumentado considerablemente las solicitudes de prórroga de proyectos, con la particularidad de que, si antes las prórrogas se solicitaban para demorar el fin de las obras, ahora se están pidiendo para demorar su inicio.

Esta caída de la actividad tiene, podría decirse, una pequeña contrapartida. Los técnicos siguen trabajando al mismo ritmo, y están aprovechando «para actualizar todo lo relativo a los instrumentos de desarrollo urbanístico y volcar todo lo desarrollado y aprobado en la página web municipal, para que los interesados tengan información sobre ello», dice Valle. La concejala explica que cuando hay mucha actividad «es muy difícil actualizarlo todo y ponerse al día porque la carga de trabajo obliga a despachar los asuntos urgentes», con lo que ahora, con menos carga, es una buena oportunidad para tener lista la información en beneficio de los usuarios.

Por otra parte, la concejala señala que el hecho de que no entren cosas nuevas no significa que no haya actividad porque «hay tramitaciones que llevan mucho tiempo, y también problemas urbanísticos muy enquistados que se intentan desbloquear».

Asimismo, el municipio tiene pendiente el desarrollo de muchos proyectos, cuya financiación fue aprobada en el mes de agosto y que se pondrán en marcha a lo largo del último tramo del año.

Entre ellos está el proyecto de recuperación del casco antiguo de Pola de Siero, cuya redacción está ya muy avanzada; las obras de la glorieta de la calle Marquesa de Canillejas en el entronque con el barrio de La Isla, a punto de ser adjudicadas, o la segunda fase de la urbanización de la calle de La Estación, en El Berrón. También están pendientes los dos proyectos de hotel de asociaciones de Lugones y El Berrón y varias actuaciones del área de Parques y Jardines, como la red de circuitos biosaludables, la contratación de piezas defectuosas de los parques infantiles de las principales localidades y la contratación de empresas de mantenimiento.

Una cuestión que llama la atención en estas contrataciones, y que deja ver la situación del sector, es el número de empresas que concurren en las contrataciones.

Según la concejala, actualmente «acuden muchas más empresas a los procesos de contratación y se producen bajadas importantes en los presupuestos de licitación; hasta ahora, como mucho había seis ofertas de empresas; hace poco nos encontramos con que en una había once». Y también se nota que, cada vez que se anuncia un proyecto, aunque no sea por los cauces oficiales, «muchas empresas llaman al Ayuntamiento para interesarse por él». Siero, afortunadamente, sigue teniendo la suficiente solvencia para hacer frente a estos proyectos, y las empresas lo saben y van tras los proyectos para salir adelante en tiempos de crisis.