Villaviciosa,

Mariola MENÉNDEZ

Las conocidas como «mareonas de San Miguel», que traen consigo grandes pleamares, continúan anegando estos días terrenos próximos al núcleo urbano de Villaviciosa, aunque, de momento, sin consecuencias. La razón de que este año se estén notando más las mareas vivas propias de octubre se debe a que el mes pasado se desmoronó la «cárcova» (dique) del «porréu» (terreno ganado a la marisma) de El Cierrón, que llevaba tiempo en mal estado y que finalmente, por el empuje del agua, acabó cediendo.

La compuerta de la «cárcova» quedó inutilizada en 2008 y desde entonces había permanecido abierta de forma continuada. Esta avería creó unas condiciones de gran interés ornitológico en El Cierrón, que han permitido la cría de algunas especies de aves: el humedal maliayo es el único lugar del Cantábrico en el que se tiene constancia de la reproducción de la cigüeñuela común y es uno de los escasos puntos en los que anida el chorlitejo chico.

Los ornitólogos llevaban tiempo alertando del deterioro del muro y de las consecuencias que podría tener su caída, pues temen que estas aves dejen de anidar en la zona si sus condiciones actuales se ven alteradas por la entrada incontrolada de agua. A este respecto, critican a las administraciones por no haber actuado a tiempo.

La petición que esta semana realizó el alcalde de Villaviciosa, José Felgueres, a la Demarcación de Costas para la reparación del dique con el fin de evitar posibles inundaciones no les han dejado más tranquilos. Adolfo Villaverde, de la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies (COA), destaca que «la solución más beneficiosa para Villaviciosa no es solicitar la reposición del muro impidiendo el acceso del agua», sino que se debe «adoptar una visión más amplia y más a largo plazo, teniendo en cuenta del valor real y potencial del espacio». El ornitólogo resalta que «la capacidad de acogida para la avifauna acuática de los «porreos» cercanos a Villaviciosa está íntimamente ligada al aporte de agua a su interior» e insiste en que «el problema radica en su forma de acceso». Defiende que no sea «de forma incontrolada», al tratarse de una zona ubicada entre el casco urbano y un espacio con un elevado valor ambiental».

Villaverde sostiene que «cualquier cambio en las condiciones ambientales, ya sea planificado o fortuito, debería ser objeto de planificación, seguimiento y control por parte de las autoridades». También propone potenciar el turismo ornitológico, adecuando estos lugares próximos a Villaviciosa.