Candás, Mónica G. SALAS

La pita pinta asturiana sustituirá la jaula por los fogones. Tras varios años de trabajo en el campo genético, los criadores de esta raza autóctona de gallina pretenden demostrar que la pita pinta no sólo es un animal ornamental, sino que su explotación puede resultar rentable para la producción de carne, huevo y pluma. Con ese objetivo, un total de 52 criadores presentaron ayer, en el edificio rehabilitado de la antigua fábrica de Conservas Ortiz, la Asociación para la Recuperación de la Pita Pinta Asturiana (ARPPA). Su presidente, Rafael Eguiño, manifestó que la principal labor de la organización es «salvaguardar la pureza de la raza y asegurar así su futuro».

En el marco de la presentación de la asociación, los asistentes al acto pudieron disfrutar de una muestra de las cuatro variedades de color de la pita pinta asturiana. En concreto, la negra, la pinta negra, la blanca y la roxa. Unos 70 ejemplares lucieron, entre cacareos, sus cuerpos redondeados, su gran plumaje y sus orejillas rojas, las principales características diferenciadoras de la gallina del Principado. Otro rasgo característico de la pita pinta es que «su carne es amarilla y con pecas, que es lo que se conoce como "roña"», explicó Rafael Eguiño.

La villa marinera fue el escenario elegido ayer para la presentación de la nueva organización, ya que, según señaló Eguiño, «la entidad está domiciliada en Carreño». Además, «el alcalde de Candás, Ángel Riego, se interesó enseguida por nuestro proyecto y nos dio la oportunidad de celebrar el acto aquí», apuntó Rafael Eguiño.

Por su parte, Riego, también presente en el acto de inauguración de la asociación, agradeció a los directivos de la entidad su compromiso de fomentar la recuperación de la pita pinta y animó a los asistentes a introducir esta raza en su dieta.

La recién formada Asociación para la Recuperación de la Pita Pinta Asturiana está compuesta por 52 criadores y 1.300 animales. No obstante, los responsables de la entidad dicen confiar en que el número de ejemplares, así como el de criadores, aumente en los próximos años. Por otro lado, apuestan por la creación de un banco de gimnospermas con el objetivo de «mantener los genes de los machos, ya que hoy en día el huevo como embrión no es suficiente para conservar su material genético», sostiene Eguiño.

De forma paralela, y con la finalidad de dar a conocer a los consumidores la rentabilidad de esta especie como productora de carne, los hosteleros de Candás acogen, durante este fin de semana y el próximo, las primeras Jornadas Gastronómicas de la Pita Pinta Asturiana. Los ocho establecimientos colaboradores son «Santarúa», «La Fonte», «El Tresmallo», «El Muelle», «Varadero», «La Masera», «La Estación» y «El Llagarón».

La asociación adelantó que habrá futuras exhibiciones, así como otro tipo de actividades relacionadas con la especie.