A la entrada del polígono industrial de Perográn, en Siero, un letrero amarillo advierte a los visitantes que están internándose en una zona vigilada por videocámaras. Pese a la importancia de su mensaje, la señal pasa inadvertida para los conductores, más preocupados por las limitaciones de velocidad que por una advertencia dirigida, más bien, a aquellos intrusos con intenciones delictivas. Pero también algunos de estos visitantes indeseados han obviado el claro mensaje de estas señales.

En la madrugada del viernes al sábado, dos individuos, a bordo de una furgoneta Citroën C15 presuntamente sustraída en Lugones, se adentraron en terrenos del polígono de Perográn y salieron, minutos después, conduciendo además un camión frigorífico de la empresa Panero Logística cargado con cerca de 3.000 kilos de productos cárnicos, supuestamente robado. Una operación que fue captada por algunas de las 13 cámaras de seguridad dispersas por los terrenos del polígono industrial, proporcionando a las fuerzas del orden una información decisiva para lograr, apenas tres días después, la captura de los presuntos ladrones.

Aunque las fuerzas policiales implicadas no han querido dar detalles del operativo, a fin de no desvelar cuestiones procedimentales, fuentes cercanas al caso reconocen la importancia de las videocámaras para desvelar detalles como la hora de la sustracción del camión, el número de personas implicadas en el robo y la presencia de esa furgoneta de apoyo.

Una circunstancia que también asume el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Siero, Mauricio Bogomak, que intercedió meses atrás ante la Delegación del Gobierno para que Perográn contase con este sistema de videovigilancia, pionero entre los polígonos industriales de la región.

«Nuestra labor fue de mediación. Perográn nos solicitó ayuda, y entre la Asociación de Áreas Empresariales de Asturias (ÁREAS) y el Instituto de Desarrollo Económico del Principado (IDEPA) sufragaron la instalación de las cámaras», relata Bogomak. El sistema de videovigilancia comenzó a funcionar en el mes de agosto de 2012 y, pese a que su objetivo primordial era el de constituirse en una defensa pasiva de esa zona empresarial, funcionando primordialmente por un mecanismo disuasorio frente a los posibles ladrones, a la hora de investigar un robo también ha demostrado una gran eficacia.

«Se trataba de un sistema pionero en Asturias, y lo cierto es que a la hora de la verdad ha demostrado ser muy efectivo. Estamos muy satisfechos con los resultados que está dando este sistema de vigilancia», señala Bogomak. Tanto es así que el concejal abre la puerta para instalar cámaras en otros polígonos del cuarto concejo.

«Si otras zonas industriales organizadas quieren instalar un sistema similar y nos piden colaboración, pondremos el mismo empeño en ayudarles y mediaremos igualmente con la Delegación del Gobierno para tratar de dotarles de un sistema de videovigilancia similar», asegura Bogomak. La distinción que realiza el edil sobre las zonas organizadas, en todo caso, resulta clave: En territorio sierense hay en torno a 25 áreas industriales diferentes, aunque de ellas sólo una minoría está gestionada por una asociación de empresarios.