Justo cuando se alcanza el ecuador del mandato, el PSOE de Carreño ha firmado su primer pacto de gobierno. Un secreto a voces, puesto que Compromisu por Carreño, antes UNA, ha significado un apoyo estable durante los dos últimos años para el PSOE. Y esto ahora queda refrendado con la firma de un documento de catorce puntos con algunos Compromisus llamativos que hacen que el acuerdo entre PSOE y Compromisu pueda llamarse el pacto de la huerta: entre los puntos figura una propuesta para crear huertos públicos ecológicos en lo que hasta 2006 era el mayor complejo turístico de Asturias y ahora está cerrada y abandonada, la Ciudad de Vacaciones de Perlora.

Este acuerdo firmado por la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Carreño, Amelia Fernández, y el concejal de Compromisu Roberto Holgado es la primera apuesta del gobierno sobre el recinto turístico desde que fracasase la inversión de 83 millones de euros liderada por media docena de empresas asturianas del sector hostelero y de la construcción.

Dicho proyecto para Perlora, además de servir para la plantación en el recinto de tomates, lechugas y coliflor, se programa con criterios de cobertura social, «que sirva de espacio formativo y educativo sobre la agricultura ecológica y la soberanía alimentaria», según reza en el acuerdo.

El PSOE se compromete, además, a la «defensa del proyecto ante la Administración del Principado». Eso sí, no se trata de convertir «la Ciudad de Vacaciones en un huerto de tomatitos cherry», como ya critican algunos a PSOE y Compromisu. El acuerdo de gobierno deja claro que la huerta «será compatible con cualquier otro proyecto turístico, no es excluyente», según aclaró el edil de Compromisu.

El pacto de estabilidad gubernamental suscrito por PSOE y Compromisu tiene una duración, según explicó Holgado: «Hasta los próximos presupuestos». Después se pondrán sobre la mesa nuevos acuerdos a desarrollar y que de nuevo estarán centrados en «el empleo, el medio ambiente y la política social».

Otro proyecto incluye una solución para el saneamiento de Carlos Albo y Pedro Herrero. «Nos reunimos con las comunidades de vecinos, y ahora tenemos claro que la forma de actuar será dar subvenciones a cada una de ellas, las que lo soliciten, para hacer la obra y conectarse al colector», explicó Holgado, que reconoció que «hay comunidades que son reacias y otras no», y por eso se ha optado por la fórmula de la ayuda económica.

Muchos de los puntos del pacto van relacionados con las políticas medioambientales, empezando por la creación de una «auditoría medioambiental, que consideramos fundamental». En Carreño ha habido estaciones de medición de la calidad del aire, pero siempre han arrojado resultados muy positivos, que no han tranquilizado a la población. «Mi objetivo es también tener más capacidad de influencia en el gobierno de Carreño, con el objetivo de llevar a la práctica una política más adecuada con el medio ambiente, y para ello me implicaré personalmente en desarrollar las tareas que nos hemos fijado», señaló el edil de Compromisu por Carreño.

No obstante, PSOE y Compromisu deberán contar al menos con dos votos más para sacar adelante sus propuestas en el Pleno.