Los agricultores de escanda piden al Principado mayor implicación y más apoyo económico a las plantaciones. Así lo expresan el presidente de la Asociación Asturiana de Productores de Escanda, Rafael Estrada, y el secretario, Enrique Malo, que ayer participaron en una jornada técnica en el Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (Serida), en Villaviciosa.

Malo sostiene que, después de haber logrado la estabilización del sector, que aumentó en los últimos cinco años gracias a la mecanización de la recolección, no deben pararse proyectos como los trabajos de caracterización de la escanda y el registro de variedades. También pelean por conseguir que el grano tenga una denominación de origen protegida. Según Malo, el futuro del sector pasa por lograr mejoras en las técnicas agronómicas para conseguir una mayor producción y progresar en las investigaciones. La escanda es un trigo que las personas con intolerancias asimilan mejor.

Técnicos del Serida como Juan José Ferreira, Guillermo García y Antonio Martínez llevan diez años investigando. Han logrado que se usen variedades más homogéneas, lo que favorece la aspiración de obtener la indicación geográfica protegida. Aún no han resuelto el encamado (caída) de la planta.