Con tres años de retraso, y con más de un enfrentamiento a causa de su ubicación, el primer punto limpio de Candás ya está asegurado. Se levantará junto a las instalaciones deportivas de La Mata y será el Ayuntamiento de Carreño quien se haga cargo de todo, salvo de su construcción, cumpliendo así con las condiciones impuestas por el Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa). El Consorcio costeará las obras para su construcción, previstas para antes de final de año, y que podrían incluso comenzar después del verano, y la contratación y gestión del personal, o el mantenimiento, entre otras cosas, será a cargo de los presupuestos municipales.

Todo ello merced a una resolución firmada por el Alcalde de Carreño, el socialista Ángel Riego, en la que se despeja la polémica de los últimos meses en el pleno municipal sobre si debía ser el Ayuntamiento o Cogersa quien costease el mantenimiento del punto limpio. Será el primero. «Este Ayuntamiento se compromete a asumir los costes de mantenimiento, explotación, transporte y eliminación de los residuos depositados en el punto limpio, con excepción de aquellos depositados por industriales que no estén obligados a la tasa municipal», dice Riego en su resolución.

Además, el Ayuntamiento facilitará las licencias que necesite Cogersa para edificar la instalación, no teniendo que abonar dinero alguno por ello. «Con respecto a los tributos correspondientes a la construcción, apertura y funcionamiento de dicha instalación, las tasas por obtención de licencia urbanística serán tramitadas y autorizadas como proyecto propio» del Ayuntamiento, señala en su escrito.

Se da así conformidad a las peticiones realizadas por Cogersa para llevar a cabo el punto limpio de Candás. Pero no se concreta lo que costará a las arcas municipales, ya que, según la resolución, desde los servicios económicos del Ayuntamiento tan solo «se indica verbalmente que dichos costes son asumibles».

En esencia, el Ayuntamiento costeará los gastos de explotación del punto limpio. Estos son los gastos vinculados con el personal y con la gestión de los residuos que no están cubiertos por un sistema integrado de gestión, es decir, los escombros, muebles, restos de podas y siegas. Estará atendido y vigilado de forma permanente por un operario del Consorcio, que pretende garantizar su buen estado de conservación, así como una atención de calidad a los usuarios, siendo su coste asumido por el municipio.

La construcción del punto limpio rondará los 600.000 euros, según datos aportados por Cogersa. Además, a tenor de los plazos establecidos para la construcción de este tipo de instalaciones, se fija un periodo de no más de seis meses, a partir de la adjudicación del contrato de obras, para su consecución.

La polémica por la instalación no estaba tanto en si tener punto limpio o no como en definir su ubicación definitiva, puesto que habían sido varios los vecinos y colectivos que habían alegado que el punto limpio junto a las instalaciones deportivas de La Mata cercenaba el crecimiento de la villa por el norte y entorpecía la actividad deportiva por el tránsito de camiones.

En ese sentido, el pleno de Carreño rechazó el pasado mes de marzo una moción del PP y Foro para revocar la cesión de los terrenos a Cogersa. Ahora, se ha dado el paso definitivo para su consecución.