Al pleno de Carreño se le acabó la paciencia. Tras varias mociones infructuosas este mandato para conseguir que el Principado exija a las propietarias de los parques de carbones de Aboño que cumplan con las autorizaciones ambientales, ahora se ha fijado un plazo límite: septiembre. Después, se dará orden a los servicios jurídicos municipales de que emprendan la vía judicial y demanden al Principado por no hacer cumplir esas autorizaciones.

Uno de los fines de las autorizaciones es que se cubran los acopios de mineral -principalmente carbón- en Aboño, que, de otra manera, como viene sucediendo en los últimos años, acaba en las poblaciones vecinas como consecuencia de la acción del viento. Entre las propietarias de los parques de carbones de Aboño se encuentran HC Energía y y el Puerto de Gijón.

Lo que el pleno ha acordado ahora, en una cita que contó con numerosos vecinos de la urbanización de Xivares, es «exigir al gobierno local que realice las actuaciones necesarias para que los servicios administrativos y jurídicos pongan en marcha las acciones adecuadas para llevar a efecto los términos de la moción aprobada en el pleno de abril». En este pleno, la mayoría aprobó la reclamación al Principado para que obligue a las empresas a que cubran los parques de carbones, pero fue desoída, ya que el PSOE, en el gobierno, se opuso.

Esta vez se establece un plazo y los servicios jurídicos ya han aclarado que es competencia del pleno iniciar un proceso judicial contra otra administración, «de tal manera que en el pleno municipal ordinario del mes de septiembre se dé cuenta a este órgano plenario de las acciones realizadas para hacer efectiva la moción». De lo contrario, se interpondrá una demanda judicial. «El pleno fue capaz de aprobar una iniciativa para llevar a los tribunales al Principado, que está haciendo dejación de sus responsabilidades permitiendo que el carbón tiña de negro carreteras, casas y el paisaje de una parte de las parroquias de Carreño», explicó el defensor de la moción, José Ramón Fernández. La proposición fue secundada por siete partidos de la corporación; sólo el PSOE votó en contra.

«Durante el debate se dijo que no era una iniciativa para olvidar en el cajón que se cierra y no vuelve a abrir», añadió Fernández, aunque finalmente «han pasado más de dos meses y vemos que no se ha hecho nada, y por eso hemos lanzado esta voz de alarma, porque conocemos el modus operandi de los socialistas de Carreño y no queremos que el Ayuntamiento falle a tantos carreñenses deseosos de soluciones prontas y efectivas».