"Tenemos unas condiciones climáticas muy buenas y debemos trabajar para potenciar la producción de manzana de mesa". Enrique Dapena, técnico del Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (Serida), planteó durante la cata de manzana de mesa que se organizó con motivo del Festival de la Manzana de Villaviciosa la recuperación de la producción a gran escala de la fruta. Asturias tuvo un gran papel hace medio siglo en el mercado de manzana de mesa y, según explicó Dapena, "es recuperable en el marco de una producción ecológica y de calidad". Según el experto, en la región sólo se produce actualmente el 3 por ciento de las hortalizas y frutas que consumimos y es necesario desarrollar programas que aumenten esta cifra.

Varias decenas de vecinos y visitantes participaron en la cata. En primer lugar degustaron tres variedades de sabores dulce, ácido y amargo. "Es importante que la gente valore cada una de las variedades", comentó Dapena. Después, comenzaron la cata con cuatro variedades de mesa. La primera fue una variedad de Canadá, muy conocida y comercializada y que se encuentra normalmente en el mercado. Otra variedad fue la liberty, que empieza a existir en Asturias gracias a la producción ecológica. Hubo una tercera, descendiente de la raneta encarnada, que es una variedad del programa de selección genética de mesa, del propio Serida "para comprobar el grado de aceptación de esta variedad". El cuarto tipo es una variedad de sidra "con buena presencia y podría tener cierta aceptación a nivel comercial". Dapena explicó que esta última variedad posee fenoles, "con unas propiedades de salud muy interesantes y un gran poder antioxidante".

La cata tenía el objetivo de acercar a la gente la evaluación sensorial de la manzana y conocer los gustos en general. En la práctica se valoraron los siguientes elementos: aroma, crujiente, azúcares, jugosidad, acidez y sensación harinosa. Belén García y Antonio Blanco, de Villaviciosa, quisieron participar en la cata de ayer "con mucho interés por aprender". José Miguel Beneyto y María Elena Fernández tampoco se quisieron perder la actividad. "Es interesante conocer y comprobar las diferentes variedades y sabores", recalcó Beneyto, mientras Fernández, "dispuesta a aprender de los expertos", confesaba: "Me gustan las manzanas y quiero descubrir la manzana ideal de mesa".

Numerosas personas disfrutaron de la exposición de centenares de manzanas de los 203 lotes de manzana de sidra de Denominación de Origen, sidra en general y variedad de sidra de mesa. Además, cuatro lagares -Cortina, El Gaitero, Gobernador y Mallador- ofrecieron una degustación de sidra de mesa.

En la calle Manuel Busto, varios puestos mostraron productos del campo y en la plaza del Ayuntamiento hubo talleres artesanales y para niños. Charo Cima, con taller en San Pedro de Ambás, dirigió un taller para niños en los que realizaron cuadros con manzanas de colores. Manuel Palacio, David Cortina y Álex Urtiago fueron tres de los pequeños que demostraron sus aptitudes para las manualidades y se llevaron a casa sus trabajos. Por la tarde hubo festival infantil y un concurso de dulce y tartas de manzana, entre otras actividades. Para el mediodía de hoy está prevista la fabricación en directo un barril de sidra de 250 litros. A la misma hora habrá una nueva degustación de sidra de mesa.