El incremento de un 50 por ciento del impuesto de bienes inmuebles, la popular contribución, aprobado por el gobierno para los pisos vacíos de Carreño afectará a más de 750 viviendas del concejo, de las cuales un 80 por ciento son de particulares y el resto de entidades bancarias. El dato viene a contradecir la versión del ejecutivo local, que anunció que la medida pretendía gravar los inmuebles desocupados y controlados por las entidades financieras.

Según los datos de la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (SADEI), el parque de viviendas vacías en el concejo es de 761. Además, un reciente estudio del Principado estima también en torno a 750 aquellas viviendas que no tienen a ninguna persona empadronada en ellos.

De ese número, según datos dispuestos por las entidades bancarias, en torno a un centenar de ellos son ya propiedad de los bancos y cajas de ahorro. Este dato choca con los motivos que llevaron a la aprobación de la medida. La nueva ordenanza municipal señala que se actuará sobre "inmuebles de uso residencial que se encuentren desocupados con carácter permanente", a cuyos propietarios "se exigirá un tributo con un recargo del 50 por ciento de la cuota líquida del impuesto". Dicho recargo se devengará el 31 de diciembre y se liquidará anualmente "una vez constatada la desocupación del inmueble", reza la ordenanza.

Sin embargo, ya hay quejas en el Ayuntamiento por el nuevo gravamen. "No tienen forma de discriminar por tramos, así que nos tememos que afectará más a los vecinos, a los trabajadores, a la clase media, que a los bancos", protestaba ayer Ramón Artime, propietario de una segunda vivienda procedente de una herencia. Como él, hay 429 personas en Carreño que han heredado o recibido en donación un piso. Para los propietarios con una segunda vivienda proveniente de una herencia, el bien recibido es más "una carga que un beneficio", añade, para apostillar que la mayor parte de ellos "probablemente se encuentren incapacitados para vender o alquilar esa vivienda, porque la oferta es mucho mayor que la demanda".

La inmobiliaria del concejo con mayor número de viviendas a la venta y al alquiler, MB Inmobiliaria, tiene listados más de un centenar de pisos en este momento, y una docena de unifamiliares. De los pisos, la mitad se encuentran a la venta y la otra mitad al alquiler, mientras que sólo una es de alquiler estacional, para temporadas. Esta vivienda estacional, no obstante, tal y como asegura el gobierno, no deberá verse obligada al pago del 50% del IBI de más.

"Este recargo se liquidará aparte, a año vencido, no cuando el IBI normal, y se procederá a liquidar una vez que se determine que la vivienda realmente está desocupada", aseguró ayer la edil de Hacienda, Amelia Fernández, quien precisó que no se gravará "a las viviendas del municipio que sean residencia habitual de alguna persona, ni aquellas que son utilizadas de forma estacional, periódica o esporádica". Muchos de los particulares con una segunda vivienda para su alquiler durante el verano no tendrían que hacer frente al plus aprobado.

Los datos

Viviendas vacías

Según el último censo del SADEI, en el concejo hay 5.983 viviendas, de las cuales se encuentran vacías 761.

Viviendas procedentes de herencias o donaciones

429 pisos y unifamiliares.

Estimación de viviendas controladas por los bancos

Entre 80 y 100, según las propiedades ya puestas a la venta por las entidades bancarias.