El Partido Popular en Carreño ha defendido que la piscina de Antromero, que a día de hoy recibe a más de 45.000 usuarios anuales, seguirá abierta, aunque finalmente se disuelva la Mancomunidad del Cabo Peñas por falta de un acuerdo estatutario entre las fuerzas políticas que conforman el órgano comarcal. "Si hay algo en lo que estamos de acuerdo todos los grupos es que la piscina va a seguir en funcionamiento", dijo el portavoz de los populares, José Ramón Fernández.
Pero para ello, precisa el edil, habrá que estar pendiente a partir de ahora de las pautas que el Principado de Asturias fija para la disolución del ente supramunicipal, que integran Carreño y Gozón. En ese marco, "el PP defiende que ambos ayuntamientos firmen un convenio de colaboración que tenga por objeto el sostenimiento de la piscina, que es un servicio indiscutible", manifestó, aclarando que para tener estas instalaciones no hace falta una Mancomunidad ni, en definitiva, "sostener chiringuitos". Aun así, los ocho trabajadores y el gerente del complejo deportivo, Manuel Muñiz, aseguran sentirse tristes y decepcionados. "Cuando todo parecía que se iba a solucionar, ahora lo único que tenemos son dudas sobre su futuro", sentenció Muñiz.
