La línea de subvenciones para rehabilitar las viviendas del casco antiguo de la Pola ha tenido muy poco éxito. A pesar de que habían sido muchos los propietarios interesados en recibir ayudas estatales y municipales para reformar sus viviendas, tan solo 10 de los propietarios de las 186 viviendas que tenían la posibilidad de optar a las ayudas han decidido presentar la solicitud agotado el plazo para hacerlo. Por esta razón, el equipo de gobierno municipal ha anunciado que abrirá un nuevo periodo de solicitud, con el fin de agotar la partida presupuestaria que se había destinado a este cometido.

La línea de ayudas, que parte del Ministerio de Fomento, establece una financiación compartida, en la que participa no solo el Gobierno central sino también el propio el Principado. Concretamente, el Estado aporta 301.000 euros y el gobierno 90.000.

Quizá la principal causa que haya echado para atrás a algunos propietarios sea el hecho de que, pese a las ayudas, ellos siguen siendo los que más dinero han de aportar, ya que la ayuda del ministerio no puede superar el 35 por ciento del coste del proyecto, y en cualquier caso con un tope de 11.000 euros, y la del Principado no puede ser de más del 10,6 por ciento del coste del proyecto, y con un tope de 3.300 euros.

La concejala de Urbanismo, Noelia Macías, adelantó que, no obstante esta baja aceptación, el equipo de gobierno de Siero seguirá insistiendo en convocatorias sucesivas hasta agotar la cantidad que han dispuesto los gobiernos central y autonómico.

"Ahora tenemos que reunir a la comisión de valoración, y una vez definido que proyectos cumplen los requisitos, sabremos qué montante de dinero resta para hacer la siguiente convocatoria de subvenciones".

Las 186 viviendas que están incluidas en el casco histórico en el Plan General de Ordenación Urbana de Siero, y que, por tanto, tienen opción a las ayudas, están situadas en un amplio espacio del Norte de la localidad. Pero no todo son edificios antiguos. También hay numerosos bloques de viviendas de la segunda mitad del siglo pasado cuyas comunidades de vecinos podrían solicitar también las reformas.

El Ayuntamiento de Siero acometió en el anterior mandato una reforma parcial del casco antiguo que afectó al piso de las calles San Antonio, Santana, Peligros y Pelayo, que mejoraron notablemente su estética. Sin embargo, una de las cuentas pendientes es la rehabilitación de los edificios. Los hay en muy mal estado, que dan mala imagen e incluso podrían tener carencias de seguridad y salubridad.

Existen, asimismo, edificios con algún tipo de catalogación cuyos propietarios tendrían más puntos que el resto para conseguir las ayudas. El gobierno espera que decidan por fin hacerlo