Miles de personas disfrutan, aún a estas horas, de la fiesta de Güevos Pintos en Pola de Siero. La insistente amenaza de lluvia no ha amedrentado a polesos ni a visitantes, que han salido en masa a las calles de la Pola para celebrar una de las fiestas con más arraigo del calendario festivo regional. No en vano, está declarada de Interés Turístico Nacional.

Durante todo el día, pero especialmente por la mañana, cientos de personas acudieron a la capital sierense para contemplar y adquirir las obras pintadas en los huevos en la carpa de los artesanos. Tanta fue la afluencia que, a media mañana, era prácticamente imposible entrar en la carpa, llena a rebosar.

En la bendición festiva, el acto central de la liturgia vinculada a la celebración, el párroco Sergio Martínez homenajeó a sus predecesores Carlos Sánchez Martino y Juan Bautista Álvarez, y no escatimó alguna pulla al presidente de festejos, Jenaro Soto, y al alcalde de Siero, Ángel García, que protagonizaron una intensa polémica en vísperas de la fiesta.

Martínez también defendió la tradición de bendecir los huevos ante quienes quieren finiquitarla. El colofón a su intervención llegó con una referencia a Tip y Coll: "El año que viene hablaremos del gobierno de la nación... si es que lo hay".

Tras el pregón del religioso, los romeros se lanzaron a ocupar las terrazas, especialmente en una plaza de Les Campes que lucía como en sus mejores días. Ya por la tarde, un espectacular desfile de grupos folclóricos congregó de nuevo a los asistentes a la celebración en las calles próximas al Ayuntamiento. Pero ni en esos momentos bajó la afluencia a la carpa de los artesanos, en la que aún había decenas de personas tratando de adquirir algún güevu pintu.

La celebración se cierra esta noche, con una gran verbena que cuenta con la actuación central de "Los Berrones".