Tras muchos años de militancia en partidos de "la izquierda asturianista", Alberto Fidalgo (Candás, 1976) tomó posesión como edil de Somos Carreño en el pleno del 31 de marzo. Ingeniero forestal, actualmente trabaja en la Consejería de Desarrollo Rural y de Recursos Naturales del Principado, un bagaje que le permite señalar "los problemas medio ambientales" y "el paro juvenil" como principales retos del Ayuntamiento.

-¿Cuáles son sus principales preocupaciones como vecino y como edil del concejo?

-Por un lado, está la problemática medio ambiental. Aquí el desarrollo económico se llevó a cabo a base de industrias que consumían recursos naturales muy grandes. Por aquel entones no se conocían muy bien cuáles eran las consecuencias de ese "boom" industrial; pero hoy sabemos del coste que están pagando los ciudadanos con su salud, y hay que tratar de ponerle freno.

-¿Cómo se consigue?

-La industria que poseemos actualmente debería tratar de ajustarse a las exigencias de las normas medio ambientales, y las nuevas empresas que se asienten en el concejo deberían seguir parámetros diferentes, sin tener coste ambiental. Es una exigencia social, y estamos viendo que la tendencia en las factorías se acerca a la sostenibilidad.

-El paro en el concejo subió ligeramente durante el último trimestre, y el problema no parece tanto el perfil de las nuevas factorías, sino que no las hay.

-La juventud es la mayor damnificada por el desempleo. Creo que el Ayuntamiento puede intentar dar un vuelco a esta situación facilitando el emprendimiento de los jóvenes, que, además, son unas generaciones muy preparadas y con un perfil interesante, en la línea de lo que me gustaría para Carreño.

-Dentro del margen que puede tener en esta línea el Consistorio, ¿qué medidas adoptaría?

-Considero que sería interesante habilitar un espacio para "coworking". Un sitio en el que los jóvenes puedan tener su lugar de trabajo, a un bajo coste, y que además permita la cooperación entre ellos. Sería un recurso interesante y que para las arcas tendría un coste mínimo.

-¿En qué otros aspectos debe trabajar el gobierno municipal?

-Otro de los problemas con los que cuenta Carreño es la gestión de residuos. Insistimos mucho en que hay que fomentar un cambio en la mentalidad de los vecinos. También en cuanto a participación ciudadana. La democracia no se limita a llevar una papeleta a la urna cada cuatro años. Debemos intentar que algunas decisiones puedan ser votadas y valoradas por todos los vecinos.