El Ayuntamiento de Siero anunció ayer que en los 20 primeros días de funcionamiento del nuevo coche radar de la Policía Local del municipio se registraron un total de 193 infracciones, de las que el 86,5% tuvieron lugar en la localidad de Lugones, y, a su vez, la gran mayoría se produjo en la avenida de Viella, en la cual se tramitaron nada menos que 156 denuncias.

El concejal de Seguridad Ciudadana, César Díaz, y el jefe de la Policía Local de Siero, José Enrique Fernández, recordaron que estos datos se producen a pesar de que los agentes sierenses levantan la mano más de lo habitual. "Si bien lo normal es empezar a multar desde los 56 kilómetros por hora en un límite de 50, nosotros lo estamos haciendo a partir de los 60", declararon ambos.

En el caso de Fernández, éste mostró su preocupación por los datos de la avenida de Viella y anunció que se tomarán medidas para garantizar la seguridad vial en la zona. "Se pondrá un paso de peatones elevado en la zona escolar del Centro Rural Agrupado (CRA) de Viella para seguridad de los niños", apuntó, al tiempo que admitió que, pese a las elevadas infracciones, la avenida de Viella no es un punto en el que sean habituales los accidentes.

Por su parte, Díaz negó que la finalidad del coche radar sea recaudatoria y aportó algunas cifras para demostrar la escasa aportación que suponen las multas para las arcas municipales. "De momento, se tramitaron 57 multas, que suponen un importe de unos 8.300 euros, que se quedarán en la mitad si los infractores pagan antes de 15 días", anunció el edil, que también recordó que, de momento, se sustrajeron un total de 12 puntos a unos conductores que en el peor de los casos llegaron a pasar a 85 kilómetros por hora en zonas urbanas.

Del mismo modo, y como curiosidad, el concejal anunció que entre los infractores se encuentran "una grúa de auxilio en carretera y una edil", aunque evitó desvelar la identidad de su compañera de Corporación apelando a la ley de protección de datos.

Asimismo, indicó que en los últimos tiempos recibió varias peticiones de vecinos de Viella y la avenida de Noreña de la Pola. Estos aseguran que es habitual que los turismos circulen por sus vías a velocidades que superan los límites marcados por la ley y por ello reclaman a las autoridades municipales que utilicen el coche radar como elemento disuasorio contra los infractores.

Con respecto a los otros puntos habituales de los controles, destaca, por encima de todos, la avenida de Oviedo de El Berrón, donde no se registró ninguna infracción, mientras que en la calle Alcalde Parrondo de la Pola sólo se produjo una docena, una cifra incluso inferior a la de La Fresneda, donde sólo se captaron 14 vehículos con exceso de velocidad.