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"Que no haya habido un accidente todavía es un milagro", denuncian los vecinos de Cayés

Los parroquianos urgen al Gobierno regional a que "acelere los plazos" de construcción de la variante que desahogará el tránsito por la localidad

Un camión toma una curva a su paso por Cayés. A. F. V.

Aunque ya ven la luz al final del túnel, los vecinos de Cayés no aguantan más. Tras 40 años soportando el tránsito continuo de vehículos pesados ante sus casas, los residentes en esta parroquia de Llanera urgen al Gobierno regional que "acelere los plazos" de construcción de la variante que desahogará el tráfico por la parroquia; un proyecto que actualmente se encuentra en fase de elaboración del estudio de impacto medio ambiental. Según las previsiones de la Consejería de Fomento, las obras podrían estar finalizadas en 2018, aunque la pretensión de la asociación vecinal es que "la licitación salga este año".

"Llevamos 40 años en esta situación, con unos niveles de tráfico y contaminación, tanto acústica como atmosférica, muy por encima de lo razonable", denunció Luis Álvarez, presidente de la asociación de vecinos de Cayés, quien aseguró que por la parroquia pasan "entre 700 y 800 camiones al día".

El malestar por esta situación está muy extendido entre los vecinos de Cayés, que además del incordio que supone el ruido de los camiones, se quejan del "peligro" que conlleva el paso de estos vehículos por las calles del pueblo.

"No hay acera ni arcén en toda la parroquia. En mi caso, para ir de casa al bar, del que me separan 500 metros, tengo que coger el coche, porque hacerlo a pie es un riesgo. Por ello la variante resulta vital para nosotros", expresó Ramón García, vecino de la parroquia.

"Que no haya habido accidentes todavía es un milagro, por eso necesitamos el nuevo vial, para quitarnos este problema de encima", reafirmó Manuel Rodríguez, también vecino de Cayés.

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