Jenaro Soto ya opta, de manera oficial, a la reelección como presidente de la Sociedad de Festejos de Pola de Siero. En apenas unos pocos días, Soto ha reunido 92 avales, más que suficientes para poder presentar su candidatura, que es la única de la que se tiene noticia.

Según los estatutos de Festejos, para presentar la candidatura a la presidencia se requiere el aval de un 10% de los socios mayores de edad. Según el censo de la entidad, hay unos 740 socios adultos, por lo que los avales requeridos son 74.

Aunque Soto ya supera con holgura esa cifra, el actual presidente continúa recabando apoyos cara a unas eventuales elecciones dentro de la entidad. La ausencia de otros movimientos, no obstante, apunta a que la de Soto podría finalmente ser la única candidatura en liza, lo que propiciaría su nombramiento automático para un nuevo mandato. El plazo para presentar candidaturas, en todo caso, permanecerá abierto hasta el 10 de agosto.

De haber finalmente más de una candidatura, las elecciones se fijarían para mediados de septiembre, en principio para el mismo día 15. En el caso de que la suya fuese finalmente la única candidatura, en cambio, Soto no convocaría una asamblea extraordinaria, sino que llevaría su nombramiento, para su refrendo, a la asamblea ordinaria de cierre de curso.

En cualquier escenario, no obstante, la Sociedad de Festejos mantendría su actividad ordinaria hasta final de año, con Soto al frente de la entidad. "Mi mandato acaba oficialmente a final de año, por lo que no habrá un vacío ni dejaremos de funcionar, sea yo reelegido o no", sostiene Soto, que de hecho ya prepara el Oktoberfest, que se celebrará en la plaza cubierta del 11 al 16 de octubre y que, entre otros atractivos, incluirá una concentración de "Food Trucks".

A Soto le flanquean en su candidatura los mismos colaboradores que han estado trabajando con él estos últimos tres años y medio. En este mandato, Soto ha tratado de dar un nuevo impulso a las celebraciones locales, al tiempo que saneaba una entidad que, cuando llegó a la presidencia en 2013, arrastraba una deuda estimada en más de 40.000 euros.

En la actualidad, la deuda de Festejos se ha reducido a poco más de 20.000 euros. En lo referente a las fiestas, Soto ha logrado dar un nuevo enfoque a los Güevos Pintos, cuyas celebraciones se extienden ya varios días, y ha trabajado por recuperar otras celebraciones.

En lo referente al Carmín, el presidente de Festejos ha protagonizado cíclicas controversias por su defensa de las tradiciones y de los intereses de la entidad, lo que le ha llevado a dar prioridad a los socios para acotar el prau de La Sobatiella y a poner coto a ciertas prácticas empresariales como la música amplificada en la romería.

Entre los retos que se marca Soto cara a este nuevo mandato figuran sanear por completo las cuentas de la entidad, encontrar un nuevo enfoque que de nuevos bríos a la fiesta de Comadres e impulsar el ansiado Museo de Güevos Pintos.