"Fue muy gordo lo que se montó aquí". Así resumió ayer Anselmo Hulton, presidente de la asociación de vecinos "Virgen del Carmen" de San Esteban de Pravia, lo ocurrido en la noche del miércoles y la madrugada de ayer en la localidad costera, cuando cuatro jóvenes mantuvieron en vilo a todo el vecindario con sus correrías y andanzas.

Al menos, uno de ellos fue detenido por la Guardia Civil, aunque según ha podido saber este periódico quedó en libertad. De los otros tres, los vecinos nada saben. Lo único -que no dejan de repetir- es que la noche fue bastante movida en cuanto a actos vandálicos y pocas se recuerdan así en el habitualmente tranquilo San Esteban de Pravia.

Todo empezó bien entrada la noche del miércoles, hacia las once y media. Entonces, uno de los jóvenes acudió a la farmacia de la localidad a buscar un medicamento con receta, que se le suministró a través del torno, al estar a esas horas cerrado el establecimiento. Entonces, el joven empezó a quejarse a los responsables de la farmacia por supuestos errores en el cambio. Sus tres compañeros rondaban por allí y parece ser que le secundaron, lo que alarmó a vecinos de la zona. Todos, según testigos presenciales, presentaban acusados síntomas de estar "descontrolados" y bajo los efectos de algún tipo de sustancia.

Se avisó a la Guardia Civil, que acudió al lugar y zanjó la disputa de los jóvenes. Pero las andanzas de éstos sólo habían hecho más que empezar por San Esteban. Según vecinos, estuvieron toda la noche por la localidad "buscando líos" y, según trascendió, intentaron robar bebida en varios bares y un supermercado. A las nueve de la mañana, relatan, uno de ellos seguía por San Esteban. Se volvió a avisar a la Guardia Civil, que finalmente detuvo al joven. "Fue una noche de pesadilla, como no se recuerda", dicen los vecinos.