"Este año hay mucha nuez y de calidad, aunque viene un poco retrasada", destacó Javier Fernández Sopeña, de Rozaes, que como cada primer domingo de octubre acudió a la feria de Camoca (Villaviciosa). Ayer se vendió a 5 euros el kilo. Recordó el refrán de que "cuando veas muergos de tres en piña, vende los gües y mételos en fariña". Vamos, que hay sequía y habrá escasez en otras cosechas.
Fernández tiene alrededor de un centenar de nozales. Hace años cada árbol daba una media de 200 kilos y ahora hay que conformarse con entre 30 y 40, porque crecen menos. "Antes estaban en tierra trabajada y más sanos porque les afectó el cambio climático. Se notó mucho en la nuez, porque al no hacer frío en invierno no mueren los hongos o bacterias que causan las enfermedades", argumentó, mientras le vendía un kilo a Juan Luis Fernández, de San Justo, y charlaban con Luis Egocheaga, de Tazones, y Corsino Suárez, de Quintes. María Jesús Corredoria, de Tornón, también llevó a Camoca sus nueces: "Hay muchísima y de buena calidad. Viene retrasada. Todavía hay mucha en los árboles". En el puesto la acompañaban Tania Tuero y Adrián Ugando. El jurado determinó que la mejor fue la de Joaquín Caso, de La Parra. El maliayés Carlos Vigón, de trece años, acompañado de su madre, fue uno de artesanos más jóvenes. Vendió bollos preñados, rosquillas, bizcocho, mermeladas y miel. Y ricos postres también ofreció Mercedes Castiello, de Grases y nombrada "Artesana de Honor" por sus 16 años colaborando con esta fiesta.
Mari Paz Campa, de Casquita, sorprendió adaptando la popular canción de Verdiciu a Camoca. Lo dejó claro: "No soy ni cantante ni cantaora, pero sí gran colaboradora de las fiestas". El párroco, Agustín Hevia, bendijo la nueva Virgen del Rosario, obra de Pepe Cuadra e inspirada en la originaria, quemada durante la guerra.
