¿Cómo era el quiosco de la música de Noreña en 1926? ¿Y la capilla de la Soledad antes de la rehabilitación que, ya en la posguerra, transformó su fachada? Los cambios en las calles y los enclaves emblemáticos de Noreña testimonian la historia de una localidad que, en el último siglo, conoció un impresionante impulso industrial y económico y, a su rebufo, cruciales cambios sociales. Una transformación que el cronista oficial de Noreña, Miguel Ángel Fuente, recoge en su nuevo libro, "Noreña: ayer y hoy", en el que confronta 82 imágenes históricas de la Villa Condal con otras actuales, tomadas por el propio Fuente, de esos mismos rincones.

"Se trata de valorar la transformación que día a día se va sucediendo en la Villa Condal, sin apenas darnos cuenta", explica el cronista. Las fotos son, en su mayor parte, de su propio archivo, aunque José Manuel Fanjul, Alfonso Pascual y Tino Fonseca, además de su hijo, el fotógrafo Álvaro Fuente, le cedieron algunas imágenes para completar el volumen, que cuenta para la portada con un dibujo original de Alfredo Enguix.