Pravia es una villa llena de obstáculos. La capital y sus alrededores se preparan para acoger el domingo la "batalla de los cuervos", en la que 600 personas tratarán de llegar a meta en el menor tiempo posible sorteando alrededor de cuarenta obstáculos repartidos por el centro, La Azucarera, el prao de Salcedo y Agones. Lo harán solos, por parejas y en equipos en dos modalidades, 6 y 10 kilómetros. "Tiene un esfuerzo físico criminal y es necesaria una preparación previa, por eso creemos que va a ser una carrera espectacular", explica José Emilio García, de Grumar.

La competición está organizada por los clubes Lateral y Grumar y Esportate Bikila, que estos días preparan las pruebas y obstáculos con la colaboración del Ayuntamiento de Pravia. En las instalaciones deportivas de Agones estará la salida y meta de la prueba y todo apunta a que será emocionante y vistosa. En todas las zonas habrá un espacio para el disfrute del público.

Tras la salida, los corredores se toparán con un equipo de fútbol americano que les impedirá el paso. También deberán sortear una alambrada y saltar un muro. La siguiente zona de obstáculos estará en La Azucarera, donde también habrá un aparcamiento de vehículos para los participantes. En la explanada deberán cargar troncos de madera y piezas de coches desgüazados.

Más y más dificultades

La "batalla de los cuervos" seguirá por el centro de la villa, donde deberán reptar por los conocidos como "monkeys", subir una cuerda de 5 metros y "carretar garrafas de 35 litros", detalla García. También habrá trampas con contenedores llenos de agua. Después se dirigirán al prao de Salcedo, donde tendrán que portar ruedas de camión, remar doscientos metros en canoa y pasar un puente tibetano. Los corredores volverán a Agones parando en la senda del río Aranguín, donde habrá arrastre de ruedas y red de escalada, y regresarán a la zona de La Azucarera, donde habrá una zona acuática con fosas de barro. Y a algunas de ellas llegarán por tubos, sorteando ruedas de camión o con tableros de equilibrio. En Agones, con la meta a la vista, tendrán que superar un gallinero y paralelas.

La prueba concentrará 600 corredores, de los que el 35 por ciento son mujeres, destaca García. El sudor y el barro estarán garantizados en Pravia. Mucho esfuerzo para los corredores y, a buen seguro, diversión para el público.