El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, ofició ayer las misas dominicales de las parroquias de San Martín de Anes y de Noreña en su visita pastoral a la zona, y no dudó en deshacerse en elogios hacia el sacerdote que está a cargo de ambas, Pedro Tardón. "Tenéis un excelente cura". Sanz le tiene "una particular estima" al párroco, a quien está "muy agradecido". "Es para mi el regalo de un buen hermano, por su humanidad y por su ministerio como cura; es fácil acompañar a don Pedro y muy gozoso saberte acompañado por él", dijo.

La visita llegaba en un día significativo por partida doble. En primer lugar, se trataba del domingo del Domund, el dedicado a las misiones, y por otra parte , la iglesia de Santa María de Noreña acogía la confirmación de diez jóvenes de la Villa Condal, que fueron bendecidos por el prelado.

Allí se mostró "particularmente contento del paso que vais a dar vosotros diez, en donde, a diferencia quizá de alguna amiga o amigo que no están confirmados y acaso no se confirmarán jamás, vosotros habéis querido libremente dar este paso como un gesto de rebeldía para hacer lo que otros no hacen y vosotros queréis hacer". Y se alegró "de esta rebeldía cristiana" y les pidió a los jóvenes que no terminase esa rebeldía ayer "sino que, ya confirmados, sigáis viniendo a la iglesia celebrando el domingo, echando una mano en la catequesis y creciendo en vuestra vida como cristianos". Por último, se mostró muy agradecido con los feligreses de las parroquias. "Agradezco a cuantos ayudáis a vuestro párroco, don Pedro, porque la iglesia de Jesús no la hacemos los curas gracias a Dios; es una labor importante la nuestra, sin duda, pero no es la única; por eso poder contar con todas las personas que echan una mano es de agradecer", concluyó.