El Juzgado de lo penal número 1 de Oviedo ha condenado al exAlcalde de Teverga, Belarmino Álvarez (PSOE), a siete años de inhabilitación para cargo público por un delito de prevaricación en la contratación de su hija como ingeniero forestal en un plan de empleo para jóvenes, en 2013. Los hechos fueron denunciados por CC OO y la sentencia es recurrible.
LA NUEVA ESPAÑA intentó localizar ayer por vía telefónica al exregidor sin éxito. La agrupación municipal socialista de Teverga, por su parte, asegura que acata el fallo judicial pero que no lo comparte y que sigue apoyando a Álvarez. "Insistimos en que todo el proceso se hizo con el secretario municipal, que dio de paso todo y se supone que dentro de la legalidad", sostiene Fernando García, portavoz del PSOE.
En agosto de 2013 el Ayuntamiento inició el proceso para la contratación de un ingeniero técnico mediante un plan de empleo para jóvenes circunscrito a la oficina de empleo del concejo. Un mes después se modificó el proceso mediante una resolución de Alcaldía que exigía la titulación de forestales, precisamente la que tiene la hija de Belarmino Álvarez. Transcurrido otro mes, y como única candidata, fue elegida para el empleo.
Un año de contrato
El asunto fue llevado a los tribunales por CC OO mediante la vía contencioso-administrativa, que consiguió paralizar la contratación. Se trataba de una beca de prácticas no laborales durante seis meses remunerada con 426 euros y otros seis meses en prácticas laborales.
La investigación abrió una vía penal para juzgar la responsabilidad del regidor en la contratación de su hija. La Fiscalía pedía ocho años de inhabilitación, que finalmente se han quedado en siete y en el pago de las costas procesales. Según el Ministerio Fiscal, "con la intención de favorecer a su hija, dictó unas resoluciones, restringiendo injustificadamente las posibilidades de acceso a otros posibles candidatos a la beca y al contrato en cuestión".
Belarmino Álvarez insistió desde un principio en que no hubo "enchufe" en la contratación de su hija como empleada del Ayuntamiento y reiteró que las resoluciones que firmó siempre tuvieron el beneplácito del secretario municipal.
